Cómo combatir el hambre por ansiedad

Donas. / Pexels
Donas. / Pexels

Algunas veces, no es hambre lo que sentimos, sino ansiedad.

Cómo combatir el hambre por ansiedad

Algunas veces sentimos hambre por ansiedad. Es decir, este tipo de “hambre” no es real. La ansiedad aparece cuando nos preocupamos excesivamente por hechos que creemos que van a ocurrir en el futuro y, en algunos casos, puede llegar a paralizarnos.

Algunas personas, cuando se sienten así, corren a la nevera a tomar lo primero que consigan; el problema es que esta respuesta inmediata no es la solución al problema real, que sigue siendo la ansiedad. De modo que, una persona puede comer y saciarse, pero vuelve a sentir hambre y continúa en ese círculo que parece eterno, todo gracias a la ansiedad.

Por ello, es que hay muchos trastornos alimenticios –como comer de forma compulsiva- que están relacionados con la ansiedad. Sin embargo, tras ellos, también se esconden otros factores, algunos emocionales, tales como carencias de afectividad en la infancia, problemas o conflictos no resueltos, inseguridades o baja autoestima.

Es por esto que, antes de correr a la despensa o abrir la nevera, vale evaluar cuál es la raíz del hambre, es decir, considerar si se trata de un hambre real, como necesidad para la subsistencia humana, o si solo es ansiedad, puesto que, cuando tenemos mayor confianza en nosotros mismos y seguridad, podemos tener más control de nuestra vida y de nuestras acciones, incluyendo el poder manejar la fuerza de voluntad.

Lo peor de todo es que, cuando sentimos esa “hambre irreal”, o por ansiedad, generalmente no pensamos en alimentos sanos, sino en comida nociva, sobre todo, se presenta una tendencia muy alta por consumir cosas dulces. ¿Te suena familiar?

Recomendaciones para combatir el hambre por ansiedad

Recuerda que hay una necesidad de comer que es real y obedece a nuestro sistema fisiológico, mientras que también podemos comer sin apetito, debido a la ansiedad. Por lo que se recomiendan las siguientes pautas:

  • Examina tu autoestima: ¿cómo te percibes a ti mismo/a?, ¿cuánta confianza depositas en tus capacidades?, ¿te sientes seguro/a ante la vida?, ¿tienes control sobre tu cuerpo?
  • Ingiere agua: a veces, también ocurre que se confunde la sed con el hambre. Evalúa si sientes sed. Puede ser que tu cuerpo necesite hidratarse. Si tomas uno o dos vasos de agua y continúas con hambre, ve por una fruta.
  • Consume más proteínas: y menos azucares. Pues, los dulces solo brindan saciedad por un instante, pero el hambre retorna. Los alimentos con más proteínas son los pescados, carnes magras, quesos, tofu, entre otros.
  • Consume más fibra: estos reducen el hambre y ayudan a controlar la saciedad. Algunos pueden ser: pan integral, frutos secos, arroz integral, entre otros.
  • Come despacio: sin prisa, porque esto solo te hará sentir más ansiedad. Disfruta realmente de lo que estás comiendo.
  • Practica alguna actividad física: esto es fundamental para combatir la ansiedad, pues nos ayuda a liberar tensión.

Además de estas recomendaciones, puedes hacer ejercicios con tu respiración, hacer meditaciones o practicar yoga. Si sientes que no puedes por ti mismo/a, entonces consulta con un especialista. @isbeliafarias90210 en @mundiario

Comentarios