¿El chocolate blanco realmente es chocolate?
Sí, has leído bien: eso que conocemos como chocolate blanco técnicamente no es chocolate.
De acuerdo con expertos gastronómicos citados por National Geographic, este dulce -que tampoco es leche- en realidad es un derivado o subproducto del chocolate ya que no contiene pasta, licor o sólidos de cacao.
La realidad es que el producto, por norma, está compuesto de un 20 % de manteca de cacao, un 14 % de sólidos lácteos, un 3,5 % de grasa láctea y aproximadamente un 55% de azúcar u otros edulcorantes.
Otro punto importante es que el “chocolate” blanco, al carecer de cacao puro es pobre tanto en teobromina -una sustancia estimulante presente en la cáscara del cacao, que tiene propiedades diuréticas, vasodilatadoras y de relajación muscular- como en cafeína.
Eso sí: esto no quiere decir que este dulce sea menos delicioso o beneficioso para nuestra salud. @mundiario