Los 10 'NO' que debes aprender a decir

Los 10 NO que debes conocer / José Portugal Pixabay
NO. / José Portugal Pixabay
Libérate con una sola palabra. Aprende a decir no en este conteo y te sentirás mejor.
Los 10 'NO' que debes aprender a decir

Si eres de las personas que les cuesta decir "no", pues has llegado a la lectura indicada; en este conteo de los 10 no, aprende a liberarte con una sencilla palabra, no. A veces sentimos que debemos dar explicaciones,  o  no deseamos quedar mal con nadie, pero al final del día, quedamos mal con nosotros mismos, pues hacemos algo que en realidad no deseamos; así que vamos allá. 

Los 10 NO

1. No regales tu trabajo: Tu tiempo y esfuerzo vale, aunque tú quizá no lo valores en este momento, debes poner precio a tu trabajo, un precio justo y acorde con tu desempeño y con las horas que dedicas a tu empleo. Recuerda que al final del día nadie regala nada y mucho menos su tiempo; que es una de las cosas más costosas que tenemos, no se puede retroceder y se va descontando. 

2. No ofrezcas consejos que no te pidan: Aunque suene duro, muchas veces ofrecemos una opinión a quien no nos ha pedido ninguna; la persona puede llegarse a sentir ofendida e incluso herida por escuchar algo que no deseaba y que tampoco estaba pidiendo. Hay que ser cautelosos, escuchar, si eso se nos pide y no dar consejos a menos que alguien nos pida nuestra opinión. 

3. No guardes tus emociones: Aunque muchas veces estamos en un lugar público, en nuestro empleo o entre familiares  o  amigos, en alguna comida familiar  o  en una celebración y nos sentimos cohibidos a soltar nuestras emociones; es bueno que te tomes tu tiempo y espacio para expresarlas; pues el guardar y reprimir lo que sientes puede llegar a ser una bomba de tiempo. 

4. No supliques: Ni por amor, ni por cariño, ni por amistad, ni por un empleo; valórate como persona, empieza por quererte. Si tú no te quieres nadie lo va a ser por ti. Rogar o suplicar es como sentir que no vales; quien te valore te va a querer sin súplicas y tal cual seas. 

5. No dependas de nadie: Cuando se dice de nadie es literal. A veces tendemos a esperar que nuestros padres, parejas o familiares, nos mantengan económicamente, que nos lleven y nos traigan a donde se nos antoje. Pero piensa por un minuto si esa persona de la que "tanto dependes" ya no está. ¿Qué pasaría contigo?. Aprende a manejar (si es el caso), aprende un oficio, aprende cocina (aunque sea a hacerte un bocadillo, por algo se empieza), trabaja y controla tu propio dinero. Sé independiente. 

6. No pidas prestado: Muchas veces la situación económica nos lleva a tener que acudir a una entidad bancaria, un familiar  o  un amigo, para resolver algún apuro económico; pero lo cierto es que muchas veces, si no somos consecuentes, responsables y puntuales con nuestras deudas, no solo van a aumentar, podemos perder grandes amistades e incluso llegar a discusiones familiares innecesarias. 

7. No pidas perdón más de una vez: La verdad es que no está mal pedir perdón; pero tampoco hay que estar rogando un perdón  o  una disculpa. De nuevo esto se trata de valorarte como persona, quererte y darte cuenta que mereces ser aceptada tal y como eres; quien no te perdone por un error, simplemente no vale la pena. 

8. No permitas que decidan por ti: Si permites que los demás decidan las cosas por ti, llegará un momento de tu vida en la que te sentirás como la canción de Ella Baila Sola, "Mujer Florero". Pues sin darte cuenta y sin abrir la boca ya habrán pedido la comida por ti, te habrán comprado justo el vestido que no querías  o  te casarán con quien decidan otros. 

9. No gastes el dinero que no tienes: Si ya tienes deudas, con una situación que nos ahoga a todos como ciudadanos y no te sobra el dinero, no lo malgastes; esto no quiere decir que no puedas darte un pequeño gusto, que para algo se trabaja; pero siempre hay que tomarse muy en serio la economía, y no gastar por gastar,  o  comprar por comprar. 

A veces hace falta liberarse y decir NO / Pixabay

 

10. No dejes de ser tú: Siempre nos van a criticar, hagamos las cosas bien  o  mal; la gente hablará bien algunas veces y otras  mal de nosotros, pero no por ello debemos perder nuestra esencia. Ser uno mismo te libera; y quien te quiera, te aceptará sin prejuicios, con tus diferencias, con tu simplicidad, con tus manías, con tus gatos y sin pedir cambios y sin exigirte que dejes de ser tú. 

En la actualidad, en un mundo tan globalizado, cargado de tantas informaciones, en lo que se convierte muchas veces en una batalla entre la realidad y la ficción que nos muestran las redes sociales; es bueno tomarse un momento para pensar si vamos por el camino correcto, si estamos haciendo las cosas bien y sobre todo si seguimos siendo nosotros mismos. Un NO a tiempo puede cambiarte por completo.

Al final ¿Qué más da lo que piensen otros de nosotros?. Seamos libres y digamos NO con respeto, sin dar explicaciones, sin suplicar y sin sentirnos mal por decir lo que queríamos decir... NO. @mundiario

Comentarios