6 pasos importantes para una vida renovada

Niño caminando./ Theresa Schenk en Pixabay.
Un niño caminando. / Theresa Schenk en Pixabay.
Sobre todo para quienes desean reinventarse y vivir una vida con plenitud, abundancia y renovación. 
6 pasos importantes para una vida renovada

La vida tiene su propio dinamismo a través de sus estados transitorios en los que a menudo necesitamos reconstruir una nueva historia entre los escombros del pasado. Tenemos el desafío de hacer presentes nuestras experiencias, de redefinir una nueva existencia, de hacer nuevas configuraciones. La vida es dinámica, es movimiento. Todo está en constante cambio, en constante renovación. Todo lo que está vivo pasa por procesos de comienzo y final, y durante estos “dos extremos”, suceden dinámicas.

Aquí enumero 6 aspectos estructurales para quienes desean reinventarse y vivir una vida con plenitud, abundancia y renovación. Sin estos aspectos básicos, los demás no se pueden desarrollar ni experimentar por completo. ¿Les echamos un vistazo?

1- Acepta la impermanencia de la vida

Quizás el mayor aprendizaje que necesitamos para promovernos en este mundo es el arte del desapego, a través de las experiencias transitorias de esta existencia perecedera. Y estamos bien atendidos en cuanto a oportunidades de formación en este aspecto, ya que la vida está especializada en ponernos constantemente a prueba ante esta impermanencia. Puede suceder que nos aferremos a una creencia que no se ajusta a nuestra realidad, a personas que ya no están emocionalmente alineadas con nosotros, a circunstancias que se quedan atrás. Queremos que las cosas duren, y esta voluntad es una fuente de sufrimiento intenso, ya que a menudo nadamos contra la corriente de lo que no tiene retorno. ¿Qué nos enseñan constantemente la vida, la naturaleza, las personas y las circunstancias? Que todo es cambiante, que todo está en proceso de transformación y por tanto nada es para siempre. Cambiar estas creencias de que todo es permanente y seguro, es el concepto clave para cambiar una nueva realidad, más coherente y feliz, interconectada con las leyes de la vida, de la que no estamos divorciados.

2- Desarrolla tu resiliencia

Sí, nos vuelven a visitar los vendavales de la vida y, a veces, es difícil levantarse de la caída. En algunas circunstancias, no podemos cambiar las causas del sufrimiento, ya que no dependen exclusivamente de nosotros, como una enfermedad, un rayo que cae sobre el porche de la casa o la muerte de un ser querido; Estos son factores externos que nos sobrevienen. Nos queda saber cómo manejarlos y esta postura marca la diferencia. En este caso específico, tendremos que esperar el curso de la vida, resolver las pérdidas y esperar a que el invierno de la vida dé paso a una nueva primavera. Recuerde que incluso el astro-rey se pone humildemente cada noche para reaparecer con toda la vitalidad al día siguiente.

Sin embargo, la buena noticia es que para la mayoría de las "crisis" que debemos enfrentar, tendremos que tener una postura proactiva y poder de toma de decisiones, buscando resolver los problemas, tomando decisiones con firmeza pero al mismo tiempo de manera flexible si el enfoque utilizado requiere actualizaciones. En otras palabras, está en nuestro libre albedrío modificar lo que podamos. La adversidad, cuando se usa bien, nos hace fuertes, resistentes.

Así, dependiendo del dolor emocional y de cómo lo afrontemos, la vida a menudo no puede ser un proceso fácil y cualquiera, incluso el más afortunado, tendrá sufrimientos y dolores arquetípicos inherentes a la condición humana. Sin embargo, no hay nada eterno; Ciclos cerrados, renacemos con nuevas ilusiones y nuevas propuestas. La vida no siempre es sorprendente, tanto en lo peor como en lo mejor. Tú eliges en qué punto de vista enfocarte. Quisiera reiterar que incluso en situaciones adversas, tenemos libre albedrío ante las posiciones, conductas y nuestra percepción de los hechos, así como para enfrentarlos. Esto marca la diferencia. Vivir es el arte de perfeccionarse, de superarse a sí mismo. Eso nos fortalece. ¡Siempre!

3- Aprende a perdonarte a ti mismo

Nos es imposible renovar nuestra vida, llevándonos sentimientos como la culpa. Además de ser una carga, es fuente de enfermedades y desequilibrios de todo tipo, siendo contraproducente con la propuesta de una vida en plenitud. Podría decirse que necesitamos perdonarnos a nosotros mismos, porque el autocastigo no resolverá el problema.

Sin embargo, para que el perdón a uno mismo sea posible, es importante aprender a reconocer sus errores y darse nuevas oportunidades. Estas condiciones solo se pueden lograr si estamos centrados en nuestra esencia, en nuestro eje, para que desde este estado de conciencia clarificada sea posible escuchar nuestra voz, esa sabiduría interior e intuitiva que nos reposiciona en nuevas perspectivas mucho más conscientes. Y lo más importante: no esperar las condiciones ideales para actuar o empezar a vivir plenamente, ya que las condiciones ideales no existen en la práctica, al menos en un estado permanente.

Por eso, es fundamental vivir cada día a la vez como si fuera el último, sin el terrible peso de la culpa. No digo que debamos ser irresponsables y llevar una vida desenfrenada, sin reglas que nos guíen, todo lo contrario. Pero como no tenemos mando a distancia ni ningún otro dispositivo que rompa la barrera del tiempo, no podemos volver atrás para arreglar lo que hicimos por error, inmadurez, vigilancia o desconocimiento. Recuerde que todo lo que le hacemos a los demás vuelve a nosotros, aunque estemos en "formación" en esta vida, porque la ley del retorno es un hecho. Si en ese momento no era posible abstenernos del error, lo único que nos queda por hacer es aprender de él y evolucionar.

4- Dale sentido a tu existencia

Tan necesario como el aire que respiramos para mantenernos biológicamente vivos, es necesario tener un sentido de vida para templar el espíritu, sentirnos vivos, útiles y orientados ante las posibles crisis existenciales que puedan cruzarse en nuestro camino, desencadenadas por factores internos. o factores externos, sin arrepentimiento ni auto-boicot. Es necesario cuestionar el sentido de nuestra existencia, tener la llama viva de buenos propósitos y metas que sean beneficiosas no solo a nivel individual sino a nivel social. Tener un proyecto de vida enriquece nuestro sentido y significado diario. De lo contrario, viviremos en un vacío constante, como si solo tuviéramos el caparazón, con el “espíritu” viviendo en otra parte.

5- Deja de auto-sabotear

El autosabotaje es el motor de la permanencia de desajustes que afectan a los principales ámbitos de la vida. Hay personas que, incluso en estado de sufrimiento, prefieren no salir de su zona de confort, dificultando el desarrollo de nuevas habilidades conductuales y relacionales, siendo sumamente dañino para cualquier proceso de renovación y redefinición de una nueva vida, dificultando “ cambiar ”el pasado a través de nuevos reencuadres.

6- Ámate a ti mismo incondicionalmente

No te rechaces ni te abandones bajo ninguna circunstancia; aceptarse a sí mismo en cualquier circunstancia. Necesitas amarte y respetarte incondicionalmente. Cuídate más, trátate con cariño, cuida tus estados emocionales, desarrolla tu autoconocimiento, tu autoestima y la confianza en ti mismo. No menos importante es aprender a manejar tus emociones, lo cual es posible a través del autoconocimiento. Amarse a uno mismo no debe confundirse con el egoísmo, ya que es un aspecto básico de la existencia. Todo el contenido que se exterioriza pasa por el tamiz de nuestras percepciones. Una autopercepción negativa o distorsionada es un verdadero desastre emocional, como una escultura de oro basada en pies de arcilla. Cuando una persona no se ama a sí misma, se vuelve frágil y vulnerable a las inclemencias ambientales ejemplificadas por pérdidas, rupturas relacionales, desilusiones matrimoniales, etc. Incluso porque ninguna persona podrá amar a otra si no tiene esta referencia en sí mismo. El amor propio es estructurante y necesita tener unas bases bien establecidas, ya que, si la vida, alguien o alguna situación “tira de la alfombra”, puedes contar contigo en cualquier circunstancia.

Reflexión transmutativa

Todo lo que existe siempre presenta este proceso de actualización y movimiento. Con nosotros no puede ser diferente, ya sea en el aspecto físico, emocional, psicológico y espiritual, ya que también somos parte de la naturaleza y de una verdad mayor. Haz las paces con la vida, recibe la pérdida como tu aliado, escucha lo que la vida tiene que decirte ante todos los problemas que se presentan. Es necesario afrontar la muerte simbólica para que sepamos qué es la vida, para que podamos renacer con nuevas formas y con nuevas oportunidades. ¡Te deseo una vida renovada! @mundiario

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