6 actitudes para superar el final de una relación amorosa

Mujer triste y pensativa./ Jerzy Górecki en Pixabay.
Mujer triste y pensativa./ Jerzy Górecki en Pixabay.

Estos puntos de reflexión no pretenden agotar el tema, ni profundizar en temas complejos y delicados, e idealmente, deben ser investigados en un proceso psicoterapéutico. 

6 actitudes para superar el final de una relación amorosa

Cuando nos referimos a la superación de dificultades, estamos viviendo momentos de desafíos, rodeados de pérdidas, decepciones y frustraciones.

Todo proceso de superación pasa por momentos de intenso aprendizaje, por crisis que confunden nuestras emociones. Tenemos la sensación de impotencia, confusión mental, desesperanza, opresión en el pecho, vacío, que hemos perdido el control de las cosas y en algunos casos el tiempo que podría haberlo invertido en otra relación, en otra situación. 

En un intento de volver a ponerse de pie, de recoger los pedazos, solemos pensar que en ese vínculo que invertimos lo mejor de nosotros y que esperábamos lo mejor del otro, las raíces parecían afianzarse en un campo que era aparentemente fértil. Pero estas raíces estaban secas, gastadas, muertas, pero nos pasaron desapercibidas. Y en esta dinámica relacional resbaladiza, lo único que nos queda es sanar el corazón, volver a ponernos de pie, renovarnos y reiniciar un nuevo viaje en la vida, para dar una nueva oportunidad a lo nuevo que se presenta allí.

Entonces, desarrollé 6 actitudes para que comiences una renovación en tu vida amorosa. Estos puntos de reflexión no pretenden agotar el tema, ni profundizar en temas complejos y delicados, e idealmente, deben ser investigados en un proceso psicoterapéutico. El objetivo es que estos reflejos te puedan aportar un poco de luz, un punto de partida si te sientes perdido y no sabes qué hacer en este momento.

1- Vive el proceso de duelo:

La experiencia del duelo tiene su propia dinámica, subjetivada, particularizada. En otras palabras, no existe una receta preparada para todas las pérdidas que tenemos, ya que cada una es única, incluso si le suceden a la misma persona. Cada pérdida tiene su historia que contar y un contexto subjetivo.

Lo importante es respetar este momento, permítete vivir cada fase del duelo. De nada sirve decidir posponer las cosas, negar, decir que todo está bien, que no estás sufriendo. Es muy doloroso vivir el funeral simbólico de alguien que todavía está vivo, pero es necesario si queremos mantener nuestra salud mental.

En algún nivel, la gente sufre y tiene algo (o mucho) con qué trabajar cuando la pérdida es significativa, ya que nadie intenta superar algo que perdió y que no tenía ningún valor afectivo.
Lo importante es aceptar los cambios de vida, intentar readaptarse a la nueva realidad que se presenta, apoyarse o incluso pedir apoyo, ya que el sufrimiento muchas veces puede ser intenso y por tanto necesitar ayuda externa.

2- No tengas miedo de empezar de nuevo, pero respeta el momento de tu dolor:


Este tiempo de pausa es fundamental para tu autocuidado, así como para una reevaluación, reflejo de todo lo vivido, de lo que hiciste mal o bien, pero sobre todo de lo aprendido en esta relación. En definitiva, se necesita tiempo para evaluar las experiencias y, sobre todo, para sanar el corazón.

Cuando los problemas en una relación no se han resuelto principalmente dentro del corazón, existe un riesgo exponencial de que estos problemas se trasladen a una relación posterior, repitiéndolos.

Primero busca reconectarte con tu paz interior para que comiences una nueva historia regenerada y fortalecida. Desde este punto, entonces se puede volar a nuevas experiencias, pues la vida presenta una riqueza infinita si desviamos el foco de lo terminado, que decidió irse y mirar la vida desde una nueva perspectiva, contemplando nuevos horizontes.

3- No tengas expectativas de que la persona pueda volver:

Algunas personas no aceptan el final de la relación a la que estaban tan apegadas. Cuando una de las partes implicadas decide emprender un nuevo camino, normalmente no sabemos gestionar lo que la otra ha dejado en el vacío de su ausencia. En este momento, podemos aferrarnos a los aspectos positivos de la relación, a los buenos momentos para basar nuestra esperanza en un posible regreso.

Pero, ¿y si el otro no vuelve?

¿Aparcarás tu vida?

Te sugiero que sigas con tu vida sin expectativas y desarrolles tu autosuficiencia, no en el sentido egoísta del término, pero no en la necesidad exclusiva del otro para suplir tus necesidades afectivas-emocionales. Esta es su responsabilidad y la de nadie más.

Este es un momento extremadamente valioso para que comiences a invertir en ti mismo, tus sueños y proyectos. Tómese este tiempo para cuidarse mejor y promover logros en su vida; los que siempre has querido. Recuerde que la satisfacción amorosa es solo un aspecto de su vida.

Entonces, a partir de ahora, comienza a enfocarte en otras áreas que incluso estuvieron descuidadas durante mucho tiempo.

4- No hagas "jueguitos":

No se engañe. Si tienes que tomar alguna decisión en tu vida, como dejar los ambientes que solían frecuentar juntos o incluso salir de las redes sociales, bloquearlo del whattsapp o donde sea, deja que esta decisión se tome a favor de tu felicidad de tu cambio interior, tu bienestar, para curarte, pero nunca lo hagas con la intención de llamar la atención o que vuelva a tu vida. No funciona o, si funciona, podría ser por poco tiempo. 

Sí, debes ponerte a ti mismo en primer lugar, apoyarte y, sobre todo, respetarte.

No hagas "jueguitos".

Respétate a ti mismo, tu vida no es un juego, tus sentimientos no son juegos, tu vida es muy valiosa para que pierdas tu precioso tiempo manipulando situaciones que en el fondo no cambiarán a través de esta metodología infantil.

Parece muy obvio lo que voy a decir, pero cuando queremos recuperar al otro a toda costa, no nos damos cuenta de este pequeño detalle: si el otro se fue, si se tomó un respiro, fue porque esa relación se agotó, el diálogo fue ineficaz, se terminó el interés y la admiración y estos son los elementos que hay que trabajar, si hay posibilidad de un retorno. 

5- Amplía tu grupo social, haz nuevos contactos:

Expande tu universo relacional, conoce gente nueva, construye nuevas amistades. Ante una ruptura relacional, las personas generalmente tienden a aislarse, a distanciarse de su grupo de apoyo, como familiares y amigos. Informé en el punto 1 que necesitas trabajar en el duelo. En otras palabras, tienes derecho a sentirte triste, a llorar y a sufrir, y eso es superar el dolor de la pérdida. Date este derecho. Si no resuelve todo este sufrimiento ahora, la cuenta vendrá con intereses más adelante.

Es posible que desee aislarse un poco para reflexionar sobre esta relación, pero no se quede en este estado solo, sin apoyo.

Después de este necesario momento de introspección, mire las posibilidades que le rodean. Haz nuevas amistades, construye nuevos puentes, amplía tu visión de nuevas oportunidades. En resumen, reconstruye tu mundo, vive una nueva vida.

Quizás esta ruptura sea tu mejor oportunidad, ya que no estabas satisfecho con esta relación y este hecho te abre las puertas para encontrar a alguien que te ame, te respete y realmente te valore. ¿De verdad fuiste tú quien perdió? ¡Piense en esto!

6- No permitas que nada ni nadie debilite tu autoestima:

Este tema es delicado y hay que tenerlo en cuenta, ya que siempre hay que fortalecer la autoestima para lo que va y viene en esta vida.

Digo esto porque en algunas relaciones, especialmente aquellas caracterizadas como abusivas, uno de los cónyuges intenta superponerse en la relación a través de comportamientos inapropiados, tóxicos y asfixiantes. Esta persona puede intentar convencerte de que no puedes seguir adelante en otra relación, que no eres nada sin ella.

En mis textos siempre señalo la importancia del autoconocimiento, porque cuando no sabemos quiénes somos realmente, el otro intentará definirnos o nos colocará en algún lugar de su vida. La pareja abusiva es aquella que intenta destruir tu autoestima para vencer y muchas veces provocar lo peor en ti para, a partir de este momento, convencerte de que eres aburrido, incomprensible, poco inteligente, poco atractivo y desequilibrado emocionalmente. La relación se basa en el control, la sumisión, la hostilidad y la posesividad.

Entonces, si vas a reanudar una relación, revisa el tema del respeto y los límites. Y si este no es el caso, cierre este ciclo, vuelva a encender y reconstruya una nueva vida. @mundiario

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