Historias de las Copas del Mundo: Dos milagros y una sorpresa mayúscula

Los jugadores de Alemania Federal  celebrando el triunfo ante Hungria, en la final de la Copa del Mundo de 1954. / www.fifa.com
Los jugadores de Alemania Federal celebrando el triunfo ante Hungria, en la final de la Copa del Mundo de 1954. / www.fifa.com
Como en toda disciplina deportiva algunas veces David vence a Goliat, pero lo que ocurrió en 1950, 1954 y 2006 fueron auténticos momentos memorables.
Historias de las Copas del Mundo: Dos milagros y una sorpresa mayúscula

Cuando Jules Rimet trabajó sin descanso para crear la Copa del Mundo, fue para desarrollar la idea de un campeonato donde estén las mejores selecciones del planeta, para que se enfrenten y decidan en igualdad de condiciones, cuál es la que se lleva el máximo premio. A pesar de ciertas controversias, en las tres primeras ediciones de los campeonatos mundiales, se puede hablar de que Uruguay e Italia eran las mejores y que por ello consiguieron alzarse con el título. A los uruguayos los acusaron de contar con el amparo de los árbitros al igual que los italianos en las ediciones de 1934 y 1938, pero la historia las reconoce como una de las grandes en su momento, sin embargo en los Mundiales de 1950, 1954 y 2006 la historia se torció. 

Uruguay destruyó las ilusiones de Brasil en el mítico Maracaná. El Maracanazo, protagonizado principalmente por una soberbia actuación de Alcides Ghigghia, provocó una depresión sin precedentes en el pueblo brasileño, que hasta el sol de hoy sigue presente, a pesar de los éxitos cosechados por Pelé, Romario, Ronaldo y compañía, aún hoy no pueden olvidar. Ni hablar de las repercusiones del Milagro de Berna, cuando Alemania sorprendió a la gran favorita, la Hungría de Ferenk Puskas, Sándor Kocsis y Zoltán Czibor.

 

Aquel partido de la finalísima en el Mundial de Suiza 1954 fue la piedra fundacional del poderío alemán en el fútbol. Los germanos, divididos entre Federales y Democráticos, padecían las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial y ese triunfo no sólo sirvió para transformar en leyendas a Max Morlock, Hans Schäfer, Helmunt Rahm y especialmente al capitán Fritz Walter, también fue un bálsamo para un pueblo que vivió esa hazaña como un renacer, después de tantos años de desgracias y calamidades.  

Italia se impone a la Francia de Zidane

Cincuenta y dos años después de la icónica victoria en Berna, Alemania ya unificada se vistió de gala para albergar su segundo Mundial de la historia. La selección de Jürgen Klinsmann partía como una de las grandes favoritas , pero rememorando aquella espectacular semifinal en México 70 y la final de España 82, la selección de Italia se encargó de quitarle la sonrisa a los alemanes. Justamente la azzurra venció a los dueños de casa el 4 de julio, cuando se cumplía un nuevo aniversario del primer título mundialista alemán. Marcello Lippi y los suyos aguantaron las embestidas locales, y gracias a su magnífico bloque defensivo lograron mantener el marcador empatado a cero en los 90 minutos reglamentarios. 

 

Los italianos finalmente se impusieron 0-2 gracias a los goles de Fabio Grosso y Alessandro Del Piero cuando ya agonizaba el tiempo extra, y se creía que todo se definiría desde los lanzamientos de punto de pena máxima. La otra llave colocaba a Francia y Portugal. Los galos fueron de menos a más en el Mundial; se colaron en los octavos de final como segundos de su grupo, enfrentándose a la España de Luis Aragonés. Con las apuestas en contra, los franceses guiados por Zinedine Zidane eliminaron a los españoles, brasileños y después a los lusitanos en las semifinales, con un gol de penal transformado por el mismísimo Zizou

En la final los dirigidos por Raymond Domenech llegaban con la vitola de grandes favoritos, amparados en sus exhibiciones previas y con el liderazgo del mago marsellés, sin embargo Zidane ese 9 de julio vistió de héroe y villano. Marcó un gol a lo Panenka ante Gianluigi Buffon, pero después dejó a sus compañeros con uno menos tras ser expulsado por agredir a Marco Materazzi. En la tanda de penales, los Italianos ganaron tras más de cinco décadas otra sorpresa se hizo presente en las finales de las Copas del Mundo

Desde entonces han ganado los mejores. España se coronó merecidamente en Sudáfrica 2010,Alemania fue una aplanadora en Brasil 2014 Francia puso al mundo del fútbol a sus pies en Rusia 2018, con grandes exhibiciones de principio a fin; Croacia  parecía que podía dar la campana, pero Kylian Mbappé y sus compañeros fueron demasiado para los balcánicos.  Faltan pocos meses para que inicie el Mundial de Qatar 2022, y cabe preguntarse si viviremos una nueva sorpresa que sacuda al balompié o se impondrá la lógica y gane alguna de las grandes favoritas. @mundiario

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