SanJosé, un valor gallego

En Galicia casi se cuentan con los dedos de las manos sus grandes empresas, que en buena lógica también s
SanJosé, un valor gallego

En Galicia casi se cuentan con los dedos de las manos sus grandes empresas, que en buena lógica también son las que cotizan en Bolsa. Hacerlo supone, entre otras cosas, aceptar unas estrictas reglas del mercado, vigiladas por la Comisión Nacional del Mercado de Valores; tener una cierta dimensión económica y quedar sometido a la valoración de los demás. En definitiva, hay que tener músculo y ser valiente para estar en Bolsa. Ahí no se llega por casualidad, ni por herencia ni con ayudas de la Xunta. Se llega demostrando lo que vales en el mercado y SanJosé se convirtió en los últimos años en el segundo grupo empresarial de Galicia por volumen de facturación, sólo por detrás de Inditex, la matriz de Zara.

Al igual que pasó con el imperio del empresario coruñés Amancio Ortega, el pontevedrés Jacinto Rey levantó el suyo trabajando por el mundo adelante, donde al menos hasta ahora ha recogido más frutos que en Galicia. De hecho, SanJosé es una empresa internacionalizada y diversificada sectorialmente, aunque su base sigue anclada al sector de la construcción, donde emplea a miles de personas. Sólo hay una cosa en la que no ha cambiado en medio de tanto crecimiento: su sede, que sigue estando en una calle tan emblemática de Pontevedra como la rúa Rosalía de Castro, sede a su vez de la empresa editora de Xornal de Galicia, participada mayoritariamente por una filial de SanJosé.

Su desembarco en la Bolsa se produce en medio de la crisis y en un contexto donde este tipo de operaciones son cada vez más aisladas, lo que sin duda acrecienta su notoriedad económica e informativa.

Vista desde Galicia, donde no ha faltado quien sintiera envidia ante esta operación financiera de altos vuelos, lo más probable es que la salida a Bolsa de SanJosé sirva para que este grupo empiece a ser conocido por el gran público, del mismo modo que otras firmas gallegas cotizadas como el Banco Pastor de los Arias o la Pescanova de los Fernández.

SanJosé debutará el lunes en las bolsas de Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia como consecuencia de absorber a la vallisoletana Parquesol, que dejará de cotizar este viernes, precisamente como resultado de la fusión. Es verdad que no ha sido fácil llegar hasta aquí, pero seguramente aún fue más difícil conquistar el derecho a intentarlo: unos trámites pueden resultar latosos pero desarrollar un gigante empresarial requiere talento, esfuerzo y tiempo. Es algo que, lamentablemente, también saben otros que han consumido su vida sin subir de peldaño.

Como periodista económico he tenido la oportunidad de glosar desde distintos medios la importancia social y financiera de otras salidas a Bolsa de empresas gallegas. Por eso mismo tampoco he querido perderme ésta, aunque a la pequeña familia de Xornal de Galicia, SA apenas se nos vea entre tantas compañías que fueron las que hicieron realmente grande el Grupo SanJosé, cuyas acciones estarán pronto al alcance de cualquier pequeño inversor. Lo importante es que Galicia taconee en el parqué y que pise bien fuerte.

Comentarios