La historia de la fusión tuvo un día: fue ayer...

... Y no solo porque se cerró el culebrón, sino porque hasta el último minuto hubo batallas en la c
La historia de la fusión tuvo un día: fue ayer...

... Y no solo porque se cerró el culebrón, sino porque hasta el último minuto hubo batallas en la cumbre. A Méndez se lo hicieron pasar mal. Julio ganó. Otros interiorizan que perdieron. Por eso se resisten y presionan.


Hay fusión en Galicia. Ni hace falta decir de qué. Bienvenida sea, sobre todo si va a ser para bien. Es decir, para bien del país; de sus empresas, que muchas andan con apuros, y de los clientes, que son millones. Podía ser un día para glosar solo la gloria, y seguro que otros harán eso. En Xornal de Galicia también glosaremos la verdad, que no siempre es lo mismo que la gloria. Tiene sus riesgos hacerlo, pero a veces hay que arriesgar. Sobre todo en un país como Galicia, donde es alucinante cómo juegan los poderosos con su poder.

Julio amaneció sobresaltado en Canido. Y cuando Julio Gayoso se sobresalta es que algo está pasando en su caja o en la del vecino, porque en su casa ya se encarga Ana de que todo esté en orden. Y bien que lo está. Julio lleva media vida inquieto ante José Luis y justo este lunes que iba a perderlo de vista, en medio de las asambleas convocadas para aprobar la fusión, alguien le hizo saber que había planes de rescatar a José Luis Méndez, es decir, al hombre que hizo grande Caixa Galicia y que por decisión del Banco de España se ha quedado fuera del control de la nueva caixa. Tengo que parar esto como sea, debió de pensar muy de mañana, allí al lado del mar de Vigo. Y vaya si lo paró. A decir verdad, más que Méndez fueron otros los que quisieron rescatar a un hombre que merece, sin duda, mejor trato del que le han dado algunos, porque entre sus enemigos, que como todo hombre importante los tiene, y esos amigos que no se imaginan la vida sin su ayuda, le han puesto a tiro de Jerónimo y de Mafo, que son los que mandan en todo esto. ¿Resultado? Varios resultados: 1) El que indicaba si el semáforo estaba verde en Cibeles precisa gafas; porque estaba rojo. 2) Los que necesitaban a Méndez en la nueva caixa para salvarse ellos mismos y sus dos empresas, desolados. Y 3) Menos mal que a Méndez le quedan otras salidas, fuera de las cajas, si es que quiere, e incluso puede que algún día de nuevo en las cajas, ya que Mafo y Jerónimo no durarán toda la vida en el Banco de España, Julio se jubilará algún día, y en la nueva caixa también habrá vacantes, y no solo las siete de la lista de ayer. Y si no las hay, siempre se pueden generar, como en los viejos tiempos.

Lo habíamos avanzado el sábado y así fue. Méndez es un nombre que no deja tranquilo a Gayoso. Es una lástima, porque Méndez sabe de cajas lo que no está en los escritos, pero es así. La historia de Caixanova y Caixa Galicia terminó haciéndolos incompatibles y Jerónimo bendijo la desunión, todo feliz por cierto. Fue a las dos de la tarde, minuto arriba, minuto abajo, y de manera expeditiva. La última intentona de las cinco sobró aún más que la primera.

Al final, más de uno va a tener que hablar consigo mismo, no vaya a ser que nadie sepa quién es quién en esta historia. O incluso que se confundan los nombres. Por lo demás, casi todo el pescado está vendido. Vigo ha ganado y A Coruña ha perdido. Pero aún puede ganar Galicia. Incluso aún puede ganar A Coruña el partido de vuelta. Javier García de Paredes tiene una gran oportunidad por delante. José Luis Pego, si no se equivoca, también. Julio se levantó ayer nervioso pero se acostó tranquilo. Se supone que al menos él sabe quién es quién en Galicia. Porque si a estas alturas no lo sabe, es que no quiere saberlo. Y eso puede traerle nuevos sobresaltos, que la historia continúa...

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