Trump buscaría perpetuar sus cambios al sistema migratorio con una antigua norma

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La oficina de Servicios Migratorios de Estados Unidos / Miami Mundo.
La crisis sanitaria puso contra la pared a un Trump que intenta a toda costa cortar el flujo de migrantes hacia el país norteamericano.
Trump buscaría perpetuar sus cambios al sistema migratorio con una antigua norma

En Estados Unidos se profundizan grandes modificaciones a su convulso y colapsado sistema migratorio. La crisis sanitaria puso contra la pared a un Trump que intenta a toda costa cortar el flujo de migrantes hacia el país norteamericano.

Y es la política migratoria de 'tolerancia cero' de Donald Trump, configurada por su sesgo proteccionista y ultranacionalista, cambió el escenario construido desde el gobierno de Ronald Reagan, quien en 1986 promulgó la Immigration Reform and Control Act, una amnistía que permitió la regularización de al menos 3 millones de indocumentados que vivían en el país.

El plan, que contó con amplio respaldo bipartidista en ambas cámaras del Congreso, era poner fin a la inmigración indocumentada, pero en los siguientes 25 años el número de extranjeros no autorizados pasó de 1.9 millones que quedaron después de la amnistía a 12 millones al final del gobierno de Barack Obama, que deportó a más de 2.5 millones de personas sin papeles en sus dos mandatos (2009-2017).

Luego de esa agresiva política de deportaciones con el objetivo de depurar el sistema migratorio, Trump busca hacer lo mismo para así crear un nuevo esquema socioeconómico de menor peso fiscal para el Estado. 

Pero justo en la noche del pasado miércoles, los secretarios de Justicia (DOJ) y Seguridad Nacional (DHS) anunciaron una nueva regla de asilo que será publicada la próxima semana en el Registro Federal. También asoman detalles de una nueva orden ejecutiva migratoria dirigida a limitar programas de visas H-1B y L-1 para trabajadores profesionales extranjeros.

Con esa eventual medida, podrían imponerse nuevas trabas sobre el proceso de asilo político al que recurren al menos el 40% de los inmigrantes latinoamericanos que llegan a EE UU, en especial los procedentes de Venezuela. @mundiario

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