Biden posterga los decretos migratorios para reunificar familias separadas
La migración es uno de los puntos clave a través de los cuales el nuevo Gobierno de la mayor potencia mundial se enfocará en reformar con un enfoque social y no político. Sin duda, Estados Unidos ahora aplicará una política de brazos abiertos bajo el principio de legalidad para incrementar su desarrollo interno, por supuesto, aprovechando y fomentando el capital humano derivado de los flujos migratorios que entran al país, aunado a los migrantes ya radicados en EE UU que están a la espera de asilo y ciudadanía.
Y es que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, decidió postergar para la semana próxima la firma de un conjunto de órdenes ejecutivas migratorias entre las cuales se incluye el nombramiento de un equipo de trabajo (task force, en inglés) para reunificar a las familias separadas forzosamente en la frontera durante el gobierno de Donald Trump.
Esta medida podría beneficiar a más de 2.000 familias y más de 400 niños que aún no han sido reubicados con sus padres en la frontera de Texas. De esta forma, se podría mitigar la crisis social y humanitaria que detonó silenciosamente en esa zona por las políticas antimigratorias implementadas por la Administración Trump.
La portavoz y secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, reiteró este viernes que “la firma de decretos está prevista para el martes”. Biden tenía previsto hacerlo este viernes, pero el retraso de la confirmación en el Senado de Alejandro Mayorkas como secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) motivó un cambio en la agenda, lo cual retrasa el proceso logístico de protección y amparo legal del Gobierno a las familias que están separadas entre el lado mexicano y lado estadounidense de la frontera.
Psaki dijo además que “el equipo de trabajo solicitado por el presidente Biden estará liderado por Alejandro Mayorkas y la primera dama, Jill Biden, tendrá una participación en las tareas de reunificación”.
La reunificación de familias afectadas por las separaciones forzadas en la frontera en el marco de la política migratoria de ‘tolerancia cero’ de Trump se llevó a cabo oficialmente entre principios de mayo y el 26 de junio de 2018. De hecho, el expresidente republicano anuló muchos trámites de asilo que pudieron haberse iniciado potencialmente para esos migrantes llegados ilegalmente a través de la frontera. Durante ese período fueron separadas 2,654 familias a cuyos padres, cuando pidieron asilo, les formularon cargos criminales, según reseñó la cadena Univisión. @mundiario
