La última acción de Meghan y Harry que podría enfadar a Isabel II

Ha pasado muy poco desde que el príncipe Harry revelara que su hermano Guillermo y él “habían emprendido caminos separados”, y la polémica que arrastra estás declaraciones siguen resonando para los británicos. Junto a él, Meghan Markle dejaba claro que su incorporación a la Familia Real ha sido complicada y está harta del acoso de los medios. Pero lejos de calmar las olas, parece que los duques de Sussex quieren seguir dando dolores de cabeza a la Casa real con sus próximas acciones, y es que según reseñan varios medios, estarían a punto de romper con una de las tradiciones que más encanta a Isabel II.

Los últimos rumores apuntan a que el príncipe Harry y Meghan Markle se alejarían de Sandringham, la casa en la que todos los años los familiares de Isabel II se reúnen para celebrar la Navidad. Es de sobra conocido que los duques viajarán durante las próximas semanas a EE UU para celebrar Acción de Gracias junto a Doria Ragland, la madre de Meghan, pero se creía que regresarían a tiempo para pasar la Navidad con la Familia Real, algo que parece que no sucederá.

Medios como The Daily Mail o The Sun, han reseñado que los duques ya habrían comunicado su decisión a la reina, lo que no queda claro, es si acaso se quedarán en EE UU junto a la madre de Meghan, o preferirán quedarse en su casa en Windsor junto al pequeño Archie.

La decisión de los duques estaría movida por su necesidad de evitar a los medios todo lo posible. Recordemos que la Familia Real complace a curiosos y periodistas posando durante su llegada a la tradicional misa de Navidad.

Desde siempre, excepto en 2012 por estar de servicio en el ejército, el príncipe Harry ha celebrado la Navidad con su familia en Sandringham, por lo que sería la primera vez que rechazara la tradición. De ser cierto, es probable que esta sea una nueva seña del distanciamiento que existe entre los duques de Sussex y la familia real. @mundiario