Melyssa cuenta su batalla con un trastorno de la conducta alimentaria

Melyssa ha protagonizado, sin duda, uno de los momentos más emotivos del espacio televisivo de Mediaset en la décima entrega de Supervivientes 2021: Tierra de nadie. Hizo llorar a la propia Lara Álvarez, que se encontraba frente a ella y en el plató, Rocío Flores no pudo contener las lágrimas.

La influencer ha demostrado mucha valentía y ha dejado una lección de superación necesaria para dar fuerza y voz a todas las personas que sufren un trastorno con la alimentación. Contó como, durante su adolescencia, se obsesionó con el peso llevándola a no comer, inducirse el vómito, a establecer esa presión que ella misma tenía a su hermana: “Aunque ella es más fuerte y gracias a Dios nunca ha caído en nada así siempre me ha tenido como modelo a seguir”.

Llegó a explicar entre lágrimas cómo se odiaba y le repugnaba mirarse a un espejo, algo que logró superar por ella misma pero que explica parte de los celos que siente cuando está en pareja: “Creo que son por mi falta de autoestima. Creo que cuando algo no funciona es culpa mía. Para que no pase tengo que quererme a mí misma”, aseguró.

Mandó un mensaje de arrepentimiento hacia sus padres por todo el sufrimiento ocasionado por sus actos de rebeldía: “Les pido perdón desde aquí. Sé que se sienten orgullosos ahora, que lo han perdonado, pero se lo digo desde aquí a ellos y a mi hermana. Si alguna vez les he llamado pesados por decirme te quiero, ahora la pesada lo voy a ser yo”, confesó sin poder contener las lágrimas.

La gran lección de superación personal

Sin duda el mensaje que hizo llegar a la audiencia hizo reflexionar y pensar acerca de la importancia de la salud mental: “Quiero decir a todas las chicas que pasen por problemas de alimentación que de todo se sale, que pidáis ayuda y os dejéis ayudar. Que no hagáis tonterías, que no os obsesionéis con esas cosas que todos somos bellos por dentro y por fuera”. @mundiario