Salma Hayek confiesa que nunca se vio casada y menos con un millonario

Salma Hayek vivirá muy triste rodeada de las mejores prendas de vestir, coches último modelo y absolutamente todos los lujos que le da su esposo, el multimillonario francés François-Henri Pinault. La actriz y el empresario se casaron en 2009 y, según comentó Hayek, ella misma se vio sorprendida por el giro radical que dio su vida pues nunca esperó vivir con "esos lujos", pues comenta que nunca creyó casarse y menos con alguien rico.

"En la época en que le conocí, ya había decidido que no quería uno de esos. Lo había organizado todo para tener una vida completamente diferente. Estaba preparada para vivir en mi rancho, que también es un santuario de animales que han sido maltratados. Mi plan era ir a Los Ángeles y trabajar un poco. No tenía previsto gastar demasiado. No me interesaban ni las joyas ni los coches; ya tenía todo lo que quería. Puede que conservara algún hombre aquí y allá. También pesaba que no podría tener hijos. Y entonces apareció él, me tomó por sorpresa: revolucionó mi universo y me dejó embarazada", explicó a una revista especializada en farándula.

Entonces queda la pregunta de qué motivó a Hayek a tirar a la basura sus planes de vida para llevar una vida al alcance de algunos privilegiados. La actriz describe así el inicio del encanto: "Recuerdo que le pregunté que, si no se dedicara a lo que se dedica, ¿cuál habría sido su sueño? Y me contestó que ser astronauta, ¡y ese era también el mío! Después empezamos a hablar sobre distintas teorías físicas, que es otro de mis intereses secretos. ¡Y de fútbol! Soy una gran forofa del fútbol. Fueron ese tipo de cosas raras que nadie sabe de mí las que hicieron que fuera algo mágico", explicó.