Miguel Bosé negó la paternidad de sus cuatro hijos
Esto lo ha decidido para que la familia pueda permanecer unida, o al menos los niños, pero su posición es poco clara.
Todo sea por el bien de la familia, ¿o por el bien de Bosé? No se sabe. Lo cierto es que en este tortuoso juicio que Miguel Bosé atraviesa en contra de su expareja Nacho Palau todo parece confuso.
Primeramente, aparentaban ser una familia feliz, con cuatro hijos. Los nenes, de nombre Diego, Tadeo, Ivo y Telmo, crecieron juntos. Todos ellos han sido producto del alquiler de vientres maternos, pero Diego y Tadeo son hijos biológicos de Bosé, mientras que Ivo y Telmo son los hijos biológicos de Palau.
Estas parejas de mellizos llevan una diferencia de siete meses y por casi ocho años han convivido, tal como hermanos en cualquier familia. Solo que ahora, las cosas se tornan un poco confusa, y las líneas entre lo que es una familia, no están claras del todo.
De acuerdo con las declaraciones de Palau, la concepción de los niños fue parte de un proyecto familiar, que ahora Miguel Bosé niega. La posición de Bosé es que los cuatro niños no son de los dos padres. Es decir, siguiendo esta premisa, no serían hermanos con derechos por igual, sino que ello dependería de quién fuese su padre.
Bosé anhela que los cuatro niños vivan con él, pero, de no haber una declaración de filiación, entonces el asunto sería desigual, ya que Palau no podría decidir sobre el estilo de vida o la educación de los cuatro niños que considera como sus hijos, ya que su paternidad no estaría reconocida, al menos no en dos de ellos.
Las personas más allegadas a Bosé, sostienen que este tipo de actitud y de decidir está relacionado con su carácter. Lo que Miguel desea, según sus amigos, es: “no estar bajo el sometimiento de nadie, ni tener que tomar en cuenta a Nacho para nada, sobre todo en nada que tenga que ver con sus hijos”. Esto concuerda con declaraciones pasadas de Bosé, quien, antes de darse a conocer la noticia de que sería padre, llegó a decir que no deseaba hijos en pareja, para así evitar lidiar con las consecuencias terribles ante una posible separación.
Palau, ahora confiesa que se siente “agobiado” y que todo lo que quiere es que los niños crezcan como cuatro hermanos y críen juntos, por lo que “confía en que se haga justicia”.
La actitud de Bosé antes del juicio fue evitativa. Su acceso a las instalaciones judiciales fue por la parte del garaje, evitando cualquier acercamiento con la presa, así como con quien fue su pareja por 26 años. Luego de culminar el juicio, regresó de inmediato a México. Palau, en cambio, se mantuvo en la entrada del recinto y habló con los periodistas sobre su deseo de que la justicia se hiciese efectiva. @isbeliafarias90210 en @mundiario
