La Infanta Cristina no contará con ningún beneficio en la cárcel cuando visite a su esposo

Infanta Cristina
Infanta Cristina. / Archivo.

El largo caso Nóos ha llegado a su fin, pero eso no quiere decir que haya acabado el calvario de la familia Urdangarin-Borbón. El exduque tendrá que adaptarse a su nuevo entorno y su esposa, la Infanta Cristina, no tendrá ningún beneficio cuando acuda a las visitas en prisión.

La Infanta Cristina no contará con ningún beneficio en la cárcel cuando visite a su esposo

El cuñado del Rey, Iñaki Urdangarín ingresó en la cárcel de Brieva, en Ávila, donde estará totalmente aislado y gozará de cierta privacidad. Allí es el exduque de Palma podrá disponer de los beneficios del preso común y preocuparse por otras tantas cosas, pero su esposa, la Infanta Cristina no dispondrá de ningún beneficio cuando decida visitar a su marido, un derecho que tiene una vez a la semana y al que no podrá llevar a todos sus hijos.

Urdangarin deberá pasar cinco años y 10 meses en prisión, tiempo en el cual la hermana del Rey podrá adaptarse a su nueva situación. Esta es la primera vez que un exmiembro de la Familia Real española entra en prisión, pero estando ya apartados de la Casa Real, la familia Urdangarin-Borbón deberá someterse al mismo régimen que viven el reto de las familias de los reclusos.

Cuando la Infanta visite a su marido no tendrá privacidad y será llamada como “familiar de Urdangarin”. Allí podría llamar la atención del resto de los visitantes, algo que según algunos medios, ellos intentarán evitar acortando las horas de visitas o apurando la hora límite para pisar la cárcel.

Nadie de la familia podrá portar bolsos o paquetes, siempre que quieran ingresar al centro deberán incorporar a la base de datos su identificación dactilar y tendrán que pasar por un control de reconocimiento de funcionarios. El preso puede ser sometido a un registro para comprobar si acaso sus familiar le entró algún objeto como algún móvil o dinero en metálico.

Las visitas tienen dos modalidades, la primera es aquella que la Infanta podrá realizar durante los fines de semana –con los viernes incluidos- que se realizarán en una locutorio y tendrán una duración máxima de 40 minutos. Tiene un límite de cuatro visitantes. La otra modalidad es mensual y solo se permiten cuatro visitantes, tiene un límite de tres horas y puede que los exduques tomen la opción especial llamada Convivencia, que se aplica a familias con hijos menores y que se extiende a un tiempo de seis horas. Sin duda la familia tendrá que adaptarse, especialmente los cuatros hijos de la pareja. Por ahora se desconoce si la Infanta decidirá mudarse, hay que recordar que desde que explotara el caso, la familia optó por mudarse hasta Suiza, donde la hija y hermana de reyes trabaja. @mundiario

Comentarios