Así ha sido el bautizo de Carlos de Luxemburgo, el esperado heredero de la Casa Ducal
El pasado 10 de mayo el príncipe Guillermo de Luxemburgo y la princesa Estefanía de Lannoy, duques herederos de Luxemburgo, dieron la bienvenida a su primer hijo, el príncipe Carlos de Luxemburgo. Aunque su llegada fue motivo de alegría, también estuvo marcada por la pandemia, por lo que el gran duque Enrique de Luxemburgo y la gran duquesa María Teresa, terminaron conociendo al pequeño por medio de una videollamada.
Meses después, la familia finalmente han tenido la oportunidad de celebrar el bautizo de su esperado heredero. Ocurrió este sábado y fue anunciado solo una hora antes por la Casa Ducal para evitar las aglomeraciones de los ciudadanos ansiosos por conocer al pequeño Carlos.
El bautizo tuvo lugar en la abadía de San Mauricio en Clervaux, a una hora en coche desde Luxemburgo. Al lugar asistió casi toda la familia con colores muy marcados, pues ellas se decantaron por la tonalidades naranja, amarilla o mostaza; mientras ellos se lucieron con el color azul. ¿Por qué? Buenos, esos son los colores de la Casa de Nassau-Weilburg, por lo que sería un guiño con el que dan a entender que su dinastía continúa con el príncipe Carlos.
Por su parte, el segundo en la línea de sucesión llevó puesto el mismo traje de encaje con el que han llevado otros miembros de la familia en sus bautizos, como su abuelo el Gran Duque Enrique o su padre el príncipe Guillermo, en una tradición similar a la que se cumple en Reino Unido con los recién nacidos de Familia Real británica.
Ahora bien, el nacimiento del príncipe Carlos fue todo un acontecimiento debido a que se temía que Estefanía y Guillermo finalmente no diera un heredero directo de la familia Nassau tras siete años de casados y las edades con las que cuentan: ella 36 y el 38.
En cualquier caso la felicidad de los padres es completamente palpable en sus gesto de amor y sonrisas dirigidas al pequeño Carlos que se mantuvo muy tranquilo durante todo el bautizo donde sus tíos, la condesa Gaëlle de Lannoy y el príncipe Luis de Luxemburgo ejercieron como padrinos.
En el evento no estuvo la única tía paterna del pequeño, la princesa Alejandra de Luxemburgo, pero si el resto de los hijos de los Grandes Duques y dos de sus primos, la princesa Amalia de Nassau y el príncipe Liam de Nassau, hijos del príncipe Félix de Luxemburgo y su esposa, la princesa Clarie. @mundiario