Pedro Cupeiro, el trompetista de Los Capris, falleció en Ferrol

Componentes de Los Capris en un poster promocional. / Mundiario
Componentes de Los Capris en un poster promocional de la época. / Mundiario

Fundaron este grupo en 1962. Pedro Cupeiro era el jefe, el primero a la hora de trabajar.

Pedro Cupeiro, el trompetista de Los Capris, falleció en Ferrol

Este miércoles ha fallecido en Ferrol mi buen amigo Pedro Cupeiro, un trompetista conocido en toda Galicia, con un historial musical de gran notoriedad. Pedro era una persona muy ferrolana, también muy racinguista, como atestigua el diario digital Galicia Ártabra. Había nacido en el municipio de As Pontes (A Coruña) y sus amigos le llamaban el de Los Capris

Estando en Los Satélites no era extraño dar paso a otros compañeros: "Y a continuación, señoras y señores, les dejamos en la grata compañía del grupo Los Capris". No eran italianos, a pesar de que a alguna gente su nombre le sonaba un poco a Italia: eran de Ferrol y uno de sus fundadores se llamaba Pedro Cupeiro, hasta hace poco en activo. Iba siempre con su trompeta en el coche, por si había que parar y dar unas notas antes de actuar con el grupo Los Almirantes o acercarse al campo de A Malata y animar a su equipo, el Racing de Ferrol.

Pedro Cupeiro nació en un pueblo pequeño, cerca de As Pontes, que se llama Bermui, y en su casa, su tío Celestino –también músico– le enseñó, tanto a él como a su hermano Pepe, a tocar y elegir instrumento: trompeta y saxo. Les enseñó bien, porque el apellido Cupeiro sonó y fuerte. Fueron muchas orquestas las que conocieron su quehacer musical: Leira Beceiro, Bellas Farto, López Malde y Bellas López.

En el año 1962, junto con otros compañeros, formaron el grupo Los Capris y su primera actuación fue en las fiestas de San Martín en Cobas. Aquí comenzaba la larga historia de un grupo de los más importantes de Ferrol, que luchó mucho para mantenerse a pesar de las adversidades. Pedro Cupeiro siempre supo resolverlas porque era un trabajador. La imagen que yo tengo de este amigo es verle sentado al volante de su furgón, luego descargando el material, montando, tocando y de regreso a casa. Era el jefe, el primero a la hora de trabajar. Y –sus compañeros lo dicen– el más honrado.

La capilla ardiente se encuentra instalada en la sala 7 del Tanatorio Artabria-Albia, en A Gándara (Ferrol). El sepelio tendrá lugar este viernes, día 6, con salida del tanatorio a las 12,00 horas hacia el cementerio municipal de Catabois. A las 13 horas se oficiará un funeral por su eterno descanso en la iglesia de Santo Domingo, en la plaza de Ultramar.

Desde MUNDIARIO enviamos nuestro más sentido pésame a su esposa Ángeles, a sus hijas Marta y Cristina, hermanos, nieta y demás familia. @mundiario

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