Portugal es un ejemplo para Galicia de cara a integrar puertos y municipios

Para que los puertos gallegos sean referentes en España deben gestionarse de una manera manera integrada, también los municipios para gestionar adecuadamente el área metropolitana. Partimos de que, en el contexto europeo, Galicia es una región periférica, pero para el transporte marítimo estratégicamente situada, tenemos a menos de 100 millas de nuestras costas una de las 3 rutas de transporte marítimo más importantes del mundo, la ruta del Atlántico.

En España hay 28 puertos de interés general (los grandes puertos gestionados por el estado) que movieron en 2017 505 millones de toneladas. El primer puerto es el de Algeciras con 101,5 millones, seguido de Valencia (73,6) y Barcelona (61,4).

Los 4 puertos gallegos de interés general son A Coruña, Ferrol-San Cibrao, Vigo y Vilagarcía. Aunque sólo representan el 6,8% del volumen de mercancías movidas en España, crecen más que la media: en 2017 un 8,2%, frente a 7% de España y han aumentado su cuota de mercado del total español desde el 6,2% en 2016 al mencionado 6,8% en 2017.

El conjunto de puertos españoles consiguen crecimientos mucho más importantes que los puertos líderes de Europa (estos últimos en una etapa de madurez), Rotterdam, el más importante de Europa, con 460 millones de toneladas, creció en 2017 el 1,3% y Amberes el segundo, con 224 millones aumentó el 4,4%. Por tanto el mapa global de transporte europeo por mar, aunque sigue teniendo un enorme peso el norte, empieza a bascular poco a poco hacia el sur.

Los puertos gallegos

En Galicia el primer puerto es A Coruña con 15,2 millones de toneladas. Es el 11º de España en tráfico movido, el 7º en crecimiento de España y el que más crece de Galicia con un aumento en 2017 del 9,2%. Le sigue Ferrol-San Ciprián con 13,6 millones (+8,6%), Vigo, con 4,2 millones (+2,8%) y Vilagarcía 1,2 millones (+8,4%). En contenedores Vigo y Villagarcía mueven más que los de A Coruña y Ferrol.

Esta es la fotografía de los puertos gallegos, pero nos preguntamos de qué manera estos datos, sin duda favorables, podrían mejorarse. Y un camino a seguir es lo que están haciendo nuestros vecinos portugueses. En octubre de 2015 fusionaron los puertos de Oporto-Leixoes con Viana do Castelo, avanzando en una gestión coordinada de sus puertos para lograr una máxima competitividad frente a sus vecinos del norte, Galicia.

Buenas gestiones en aeropuertos y puertos

El puerto de Oporto-Leixoes está gestionado por un grupo empresarial turco: Yildirim, una gestión privada similar a la realizada con su aeropuerto de Oporto cuya gestión ha sido cedida al grupo francés Vinci. Ambas cesiones de la gestión a manos privadas ha sido propiciada desde la intervención del año 2011 de la troika europea, con unos frutos magníficos para ellos.

Portugal, después de esta fusión de hace 3 años, sólo dispone de un puerto de interés general en el norte, para toda la Eurorregión, frente a los cinco gallegos, es una decisión estratégica de calado, muy inteligente.

Y los resultados de la fusión y de la gestión privada, como en el caso del aeropuerto de Oporto, han sido excelentes: el puerto de Oporto-Leixoes movió en 2017 19,5 millones de toneladas, un 6,6% más que un año antes. Los datos de la gestión privada del aeropuerto Sá Carneiro también son muy favorables y los hemos analizado aquí el mes pasado.

En Galicia, Puertos del Estado mantiene las autoridades portuarias de Vigo, A Coruña, Ferrol, Vilagarcía y Marín. Los intentos de crear dos organismos unificados, la autoridad portuaria de Rías Baixas (Coruña y Ferrol-San Cibrao) y la de Rías Atlas (Vigo, Villagarcía y Marín), si es que los ha habido, no han dado frutos hasta el momento.

¿Y por qué no reforzar y concentrar en una sola gestión las terminales portuarias gallegas para mejorar su capacidad, para realizar una gestión coordinada? El modelo de integración de éxito portugués es necesario para ganar tamaño y realizar una gestión competitiva, útil y eficaz. Estamos hablando de ahorro de costes administrativos, sí, pero sobre todo y lo más importante, de planificar una oferta competitiva para este grupo de puertos con una única autoridad.

Con la creación de una autoridad portuaria única que gestionara las radas de los puertos interiores y exteriores de Coruña (puerto interior y exterior), Ferrol (puerto interior y exterior) y San Cibrao, se avanzaría en una planificación estratégica mucho más racional de las 5 radas. Se especializaría cada una de ellas en un tipo de mercancía y se evitaría las absurdas competencias que se pueden producir con 2 autoridades portuarias distintas de puertos que están a 10 kilómetros de distancia por mar, como sucede ahora, gestionado adecuadamente la carga general y petróleo en Langosteira, contenedor en el puerto exterior de Ferrol e interior Coruña, cruceros y pesca en interiores Coruña y Ferrol, gas en Mugardos, bauxita en Ciprián…

Consenso PP - PSOE

La nueva legislación portuaria española y europea que emana de la Ley 33/2010, consensuada por los dos partidos mayoritarios, PP y PSOE, dispone que el puerto es una empresa que debe autofinanciarse y obtener una rentabilidad. Debe promocionarse e insertarse internacionalmente, debe funcionar como una empresa privada, ser competitiva.

En la etapa económica que nos ha tocado vivir, la globalización, la competencia es muy dura, los movimientos de mercancías por mar enormes y lo serán más en el futuro (no olvidemos que el transporte marítimo es muy eficiente y ecológico). Todo ello nos obliga a funcionar en tamaños mayores. Ahora hay que hablar de competencia entre unos agregados o grupos de puertos frente a otros, no de competir todos contra todos.

El competidor no es Ferrol o San Ciprián sino Gijón, Bilbao, Algeciras y en menor medida Vigo. Y todos los puertos españoles deben de competir con los del norte de Europa y Portugal para captar mercados –mercancía general y también contenedores- que en este momento son cautivos en esos países del norte europeo. Cuanto más amplio es el mercado más amplio debe ser el tamaño.

El tamaño importa y mucho, por eso consideramos que la gestión “del puerto” debe ser la gestión “de los puertos”, especializando cada rada en su o sus tipos de mercancía: ya sea general (carbón, maíz, petróleo, gas, chatarras, etc.), pesquera, turística-recreo y contenedor. Este último tipo es el verdadero futuro del mundo portuario que cada vez basculan más los tráficos de los grandes puertos del mundo.

La buena gestión de los puertos del norte de Europa es lo que ha llevado a esos puertos a ser lo que son, con unos movimientos y crecimientos en las últimas décadas espectaculares en sus movimientos de carga general y TEUS (contendores), muy superiores, desde luego, a los de los puertos del sur de Europa (la franja que divide el norte con el sur estaría en Nantes/Saint Nazaire).

Y aunque es un tema distinto al de los puertos, para un mayor progreso socioeconómico hay que hablar también de la integración municipal.

En España tampoco en el tema de la integración de los municipios estamos avanzando. En nuestra área metropolitana deberíamos de estar trabajando de lleno en las fusiones de A Coruña con Arteixo y Culleredo. Primero ahorraríamos un valiosísimo dinero público en actividades redundantes y en segundo lugar se podría realizar una planificación más competitiva y racional en todos los ámbitos: urbanismo, movilidad, infraestructuras, economía, etc. Es el momento de una gestión mucho más ambiciosa en estos temas, es el momento de la integración, para mejorar la gestión y ahorro de gastos, para un mayor avance socieconómico.

Los partidos están cambiando de líderes, el asesor económico del nuevo presidente del PP, Daniel Lacalle, es un brillante economista que tiene muy claros estos conceptos. También Ciudadanos y PSOE. ¿Se plantearán estos temas en el futuro próximo?

Si no hacemos la fusión de las autoridades portuarias y los municipios, la creación de una oferta competitiva del puerto y la planificación del área metropolitana y será mucho más difícil, no digo imposible, pero sin duda más difícil. Sería un enorme avance, un paso de gigante, más progreso para luchar contra la lacra del envejecimiento de la población, y además sería entendida e incluso alentada en este momento histórico por la gran mayoría de la ciudadanía. @mundiario