Gallegos en la División Azul: presentación en el Sporting Club Casino de A Coruña

Portada Solo muere el olvidado/ Actas
Portada de Solo muere el olvidado. / Actas
Este 29 de diciembre A Coruña acoge la presentación de un libro paradigmático. La historia de un Batallón de la legendaria batalla de Krasny Bor en la que pelearon como leones medio centenar de gallegos.
Gallegos en la División Azul: presentación en el Sporting Club Casino de A Coruña

La División Azul es una de las unidades militares que más interés ha despertado entre los historiadores y estudiosos de la Segunda Guerra Mundial. En la última década, ha generado una intensa producción bibliográfica. En esta ocasión un libro singular nos acerca la historia de media centena gallegos en el frente más letal de la contienda y en una batalla legendaria.

Este 29 de diciembre se presenta en el Sporting Club Coruña a las 28 horas y con entrada libre Solo muere el olvidado del Coronel de Infantería de Marina José Manuel Estévez Payeras. Presenta el escritor Juan Mariñas, Luis Valiente, editor de Actas,y el coronel Lorenzo Fernández Navarro de los Paños

Solo muere el olvidado no es un libro más. Ha supuesto todo un revulsivo en un maremágnum de distintos géneros que se han dedicado a un episodio bélico que arrasa en el interés del público. Entre las características que lo singularizan está el dedicarse a un batallón con un nutrido grupo de gallegos entre sus combatientes. Todos ellos, aparecen en la obra con nombres, apellidos, sus pueblos, ciudades, motivaciones de alistamiento y con microhistorias que enriquecen una obra global. Desde el capitán ferrolano Quintana Lacacci, que tendría una destacada intervención en el freno del 23 F y que luego sería asesinado por ETA, al médico militar coruñés Ojea a varias decenas de soldados anónimos que protagonizan anécdotas y sobre los que el autor va construyendo una obra coral.

Una intensa investigación

Los gallegos que fallecieron allí jamás pudieron contarlo, pero los que volvieron apenas hablaban de ello con sus allegados. La experiencia bélica permaneció como una faceta íntima  y sus familias conocieron muy someramente su papel como valientes soldados en el frente más letal de la II Guerra Mundial. Algo que Estévez solventa en Solo muere el olvidado.  Además, lo hace intentando llegar al mayor número de lectores, no solo a los entusiastas de la historia militar.

Siete han sido los años que José Manuel Estévez ha dedicado a investigar las vidas de los miembros del batallón. No fue fácil. Los fondos de los archivos militares de Ávila y Segovia, sus expedientes, las aportaciones de las familias de los protagonistas, principalmente diarios y cartas escritas desde el frente, han sido confrontados con fuentes bibliográficas y hemerográficas. Desde el parte militar más exhaustivo a un programa de fiestas de un pueblo donde se citaba a un divisionario, no dejó nada por explorar.

El autor huye de tecnicismos castrenses en favor de una historicidad «humana». Se centra en dar a conocer la difícil y arriesgada vida diaria de esos gallegos  que combatían lejos de su tierra. Prefiere anécdotas de compañerismo o solidaridad que referencias políticas o geoestratégicas. Una obra desde la trinchera con la habilidad de integrar al espectador en primera línea de fuego junto a hombres reales, de carne y hueso con sus aspiraciones y tragedias personales. 

Otra obra sobre gallegos en la División Azul

                                       Portada libro/ Arenas

Portada del  libro. / Arenas

Curiosamente no es la única obra aparecida al respecto. Una iniciativa editorial de la conocida Librería Arenas de Coruña, es el tercero de la serie un libro sobre monografías de gallegos en la Segunda Guerra Mundial de Carlos Fernández Santander y Lorenzo Fernández Navarro de los Paños. Una magnífica edición, a color y papel de extrema calidad que también fue presentado en el Sporting Club de A Coruña.

Abre la obra una extensa semblanza de la División desde su gestación hasta el regreso de sus últimos combatientes en el Semiramis. Heroicidad en circunstancias de especial dureza, aventura, y valores españoles de entonces, que serán personificados en los soldados gallegos en el frente ruso. Junto al repaso a la trayectoria de José Pérez Castro y Antonio Ponte Anido, divisionarios laureados por sus acciones en Possad y Krasny Bor, se habla de Antonio Sánchez Pascuala, José Luis Gómez Díez-Miranda, Venancio Paredes Pardellas, y el propio padre de uno de los autores, Jesús Fernández-Navarro. Incorpora también datos sobre más de un centenar de voluntarios gallegos, muchos de ellos condecorados, la situación de los excombatientes, la política de olvido, a la hermandad coruñesa y su boletín Spansky Jarashó, activos aún en los años sesenta.

Entre los artículos aportados, destaca el de Rafael Lema sobre José Méndez Lema condecorado guripa de Braño-Vimianzo herido también en Krasny Bor o el de Carlos Fernández Barallobre  que incluye un anexo sobre los coruñeses de la División

                                             invi

                                  Invitación al acto. / Sporting Club

Sporting Club Casino A Coruña

En  1890, un grupo de unos sesenta notables coruñeses se reunieron para materializar la idea de crear un club que emulase a los clubs internacionales de moda en ese momento. El primer objetivo fue proporcionar a los asociados un lugar de reunión y un espacio para recreo, así como el fomento de actividades culturales y deportivas.

La denominación de la sociedad se mantuvo como “Sporting Club” hasta 1939, cuando se prohibieron los nombres anglófilos, pasando a denominarse entonces durante casi cincuenta años “Casino de La Coruña” hasta que, recuperada la democracia, se decidió el nombre actual de “Sporting Club Casino”. Desde el momento de su creación, la sede social está ubicada en el mismo lugar de la Calle Real, en pleno centro de la ciudad herculina y celebra con asiduidad conferencias y presentaciones de libros.


¿Dónde? Sporting Club Casino A Coruña. Calle Real 83 

¿Cuándo? 29 de Diciembre a las 20 horas

Entrada libre y obligatoria mascarilla @mundiario

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