¿Viviremos en un futuro en ciudades asiáticas?

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Vista de la mayor megaciudad: Tokyo

Este artículo reflexiona con datos de las Naciones Unidas, MIT o McKinsey sobre el acelerado proceso de urbanización, el papel de las megaciudades y la pérdida de peso de occidente (Europa y Norte América) en la población mundial.

¿Viviremos en un futuro en ciudades asiáticas?

Antes de empezar, voy a compartir algunos datos que pienso que nos ayudaran a entender porque se me ocurre que pudiéramos acabar viviendo en una ciudad asiática. Por ejemplo, Asia posee más de la mitad de la población urbana mundial (53% en 2014), seguida por Europa (14%) y Latinoamérica (13%). Según las estimaciones de las Naciones Unidas la población mundial a finales de este siglo crecerá en cuatro miles de millones, de los cuales se espera que crezcan tres en África y uno en Asia, dejando una población mundial de 11 miles de millones de habitantes. Con ello, el 80% de la población mundial se estima que vivirá en África y Asia (nueve miles de millones) y además se espera que entre 2014 y 2050 el 37% del crecimiento poblacional urbano se concentrará en India, China y Nigeria.

Según las Naciones Unidas, en 2014 más del 54% de la población actual vivía en ciudades, una proporción que se espera situarse en el 66% para el 2050. Un reciente estudio sobre poblaciones realizado por McKinsey con datos de las naciones unidas confirma que la tasa de urbanización durante los últimos años ha crecido y estima que seguirá haciéndolo en un futuro. La tendencia es que cada vez exista una mayor proporción de la población mundial que viva en ciudades. Pero… ¿es que nos gustan más las aceras que los verdes prados?

No dudo que habrá gente que les guste más, pero el motivo lógicamente es que en la ciudad es donde se va a producir más y por tanto donde va a generarse más trabajo. Un proyecto de investigación del MIT de nombre Cityscope ha generado una base de datos con información de 2.600 ciudades desde 2010 a 2025 y en una de sus conclusiones afirma que alrededor de 500 ciudades con menos de diez millones de habitantes serán las responsables de la mitad del crecimiento mundial hasta 2025. No obstante, en realidad, los motores económicos serán las llamadas megaciudades (ciudades por encima de diez millones de habitantes); las cuales según Cityscope cada vez más, estarán localizadas en Asia. Un ejemplo actual son los casos de Nueva York y Los Ángeles donde se produce el 13% del PIB de Estados Unidos o la versión europea con París y Londres que ya acumulan el 9% en Europa.

Este tipo de tendencia va plantear muchas dudas sobre el modelo de gestión municipal actual. Un ejemplo pudiera ser plantearse que dado que la población en las ciudades es más productiva, su contribución al estado del bienestar es mayor (paga una mayor parte de las pensiones, los subsidios y por ejemplo la seguridad social) y por ello, su voto debería tener un mayor peso en las elecciones (piensen en las implicaciones para votaciones como Brexit o el dilema catalán con Tabarnia). Otra línea de discusión puede venir sobre cómo decidir el impacto en los presupuestos de las inversiones que se realizan en una ciudad pero que afectan a una región o un estado, por ejemplo la instalación de líneas de AVE o la ampliación de un puerto. Fuera de la gestión pública, privadamente las decisiones a largo plazo también se ven altamente afectadas, como por ejemplo, comprar una casa en las afueras de una gran ciudad (esperando una subida del precio que pueda venir acompañada de inversiones para mejorar el barrio) o comprarla en un pueblo a 40 kilómetros de distancia (donde puede caer el precio y quedar alejado en el largo plazo pero en el corto ser feliz sin ruido ni polución).

Aunque por ahora no creo que salgamos corriendo hacia Dhaka o Kuala Lumpur, os invito a reflexionar en la posibilidad de que nuestros hijos sí emigren a Asia o África; de la misma manera que algunos de nuestros compañeros lo han hecho al norte de Europa. Espero que el artículo también nos sirva para pensar que posturas a defender o evitar en relación con nuestras presentes y futuras instituciones municipales o regionales. @mundiario

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