La UE y EE UU acuerdan una reducción mutua de aranceles en sectores específicos
La dinámica comercial entre las dos potencias exportadoras más importantes de Occidente ha entrado en una nueva era. Más allá de la vehemencia que existe en la política exterior de Estados Unidos y de la Administración de Donald Trump, la sensatez ha prevalecido por encima del proteccionismo y el nacionalismo que pregona el actual líder de la primera potencia mundial.
Y es que la Unión Europea (UE) y Estados Unidos anunciaron este viernes que han acordado “un paquete de reducciones arancelarias” en áreas como las langostas estadounidenses o los mecheros y alimentos preparados europeos, un pacto que, según las delegaciones negociadoras de ambos bloques, “permitirá eliminar gravámenes a cientos de millones de euros en exportaciones”.
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Esto implica que tanto Washington como Bruselas deberán hacer concesiones importantes en materia comercial. Ambas potencias se verán en la obligación pactada de cobrar menos impuestos aduaneros a las importaciones que una realice comprando los productos de su contraparte. La medida no afectará las balanzas de pagos comerciales de las empresas ni de los gobiernos de Estados Unidos y de los países europeos debido a que mantendrá un punto de equilibrio para que la potencia norteamericana no obtenga altas tasas de rentabilidad por exportaciones de menos volumen hacia la eurozona (Alemania, Francia, Italia, España, Holanda, entre otros).
La Comisión Europea (CE) y el Departamento de Comercio estadounidense informaron en un comunicado conjunto de que “estas reducciones arancelarias son las primeras negociadas entre Estados Unidos y la UE en más de dos décadas”.
Por lo tanto, se trata de un hecho histórico que no expandirá el déficit comercial de Europa, lo cual le podría permitir un ahorro de hasta 150.000 millones de euros en pagos de aranceles. Del otro lado del Atlántico, tampoco se ve afectado EE UU debido a que su balanza comercial se encuentra en números verdes pese a su deuda de más de 50 billones de dólares con China y la actual recesión que sufre en su producto interno bruto, estimado en unos 19 billones de dólares. @mundiario
