Trabajadores y empresarios se quedan sin saber qué será de ellos, al menos hasta el martes

Empresas del polígono de A Grela, en A Coruña / galicianaves.com
Empresas del polígono de A Grela, en A Coruña / galicianaves.com

Las diferencias entre el PSOE y Unidas Podemos dificultan la adopción de medidas. El presidente del Gobierno afirmó que se prevé un "impacto de envergadura" en la economía española debido a la crisis y aseguró que el Gobierno hará "todo lo que esté en su mano" para amortiguar los efectos.

Trabajadores y empresarios se quedan sin saber qué será de ellos, al menos hasta el martes

Tras el Consejo de Ministros de este sábado, trabajadores y empresas –también los bancos– se quedan sin saber qué será de ellos, al menos hasta el martes, día de otro consejo. En pleno debate sobre el estado de emergencia suscitado por la crisis del coronavirus, las diferencias entre el PSOE y Unidas Podemos dificultaron la adopción de medidas.

El presidente del Gobierno afirmó que se prevé un "impacto de envergadura" en la economía española debido a la crisis y aseguró que el Gobierno hará "todo lo que esté en su mano" para amortiguar los efectos. "A partir de hoy la autoridad competente en todo el territorio nacional será el Gobierno de España", zanjó Sánchez.

PSOE y Unidas Podemos discrepan 

El texto del real decreto de medidas para el estado de emergencia –avanzado por MUNDIARIO– se debatió en una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros que duró más de siete horas y estuvo marcada por las discrepancias entre el PSOE y Unidas Podemos por el plan de choque económico, aplazado hasta el consejo del martes. Aún así, Pedro Sánchez hizo un avance al respecto con medidas para ayudar "a los autónomos, a las familias, a los más vulnerables". Habló también de facilitar los ERTE y de inyectar liquidez en la economía. "Y por supuesto apoyar la vacuna contra el coronavirus", concluyó.

Según ha sabido MUNDIARIO, desde Unidas Podemos invocaron el artículo 128 de la Constitución para nacionalizar la sanidad e intevenir las empresas privadas del sector y reclamaron el impacto social de las medidas para asumir los salarios e indemnizaciones de los trabajadores que pierdan el empleo a raíz del estado de alarma. También exigieron, sin éxito, estar en el núcleo del equipo gubernamental que gestionará el estado de alarma. Preguntado Pedro Sánchez sobre las posibles diferencias en el seno del Gobierno, eludió el asunto y se salió por la tangente. En cambio no descartó ninguna medida sobre la posible nacionalización –se supone que transitoria– de sectores privados como la energía y la sanidad.

"Vamos a ver. Hemos tenido muchas hora de debate, un debate que por ley tenemos que guardar la debida discreción, la debida confidencialidad", dijo Pedro Sánchez al ser preguntado sobre si Pablo Iglesias, vicepresidente segundo del Gobierno, pidió estar en el puente de mando de esta crisis en la reunión de este sábado. @mundiario

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