¿Tienen futuro las monedas locales que impulsan algunos ayuntamientos?

Ada Colau.
Ada Colau.

Bristol, Sicilia, Nantes, Santa Coloma... tienen monedas locales, por lo general virtuales. Ahora Barcelona se dispone a seguir sus pasos. Según el diario El País, son iniciativas "dignas de apoyo" por la "innovación social" que representan.

¿Tienen futuro las monedas locales que impulsan algunos ayuntamientos?

Ada Colau y Núria Parlón, alcaldesas de Barcelona y de Santa Coloma (Barcelona) decidieron lanzar iniciativas de moneda virtual siguiendo los pasos de Bristol, Nantes y otras ciudades. Bristol, Sicilia, Nantes... van por delante.

La moneda de Santa Coloma –primera experiencia de este tipo en España– cuenta ya con más de un centenar de establecimiento adheridos, una cifra que permite a su alcaldesa, Núria Parlón, tener la esperanza de situarse entre las experiencias más exitosas. Los vecinos hablan ya de los parlones pero el Ayuntamiento de Santa Coloma decidió sacar a concurso el nombre de su moneda.

De la mano de Ada Colau, la moneda local de Barcelona se introducirá en 2017 con una prueba piloto en tres distritos del eje del Besòs para extenderse en 2019 a toda la ciudad condal. 

El Ayuntamiento de Santa Coloma se marca la meta de dar "un espaldarazo a la economía local", con especial repercusión en el tejido comercial, "potenciando la fidelización del cliente".

Seis ciudades de Sicilia (Italia) ya hicieron frente a la crisis económica creando el sardex, que ahora puede utilizar en toda la isla y permite obtener créditos más baratos.

Nantes (Francia) tiene también una moneda virtual con la que pueden pagarse desde los impuestos al alquiler de la vivienda.

En Bristol (Reino Unido), donde desde 2012 funciona el bristol-pound, ya se han adherido más de 600 empresas cuyos empleados pueden cobrar parte del salario en esa moneda.

Según el diario El País, son iniciativas "dignas de apoyo" por la "innovación social" que representan. Para el subgobernador del Banco de España, Fernando Restoy, la iniciativa de Barcelona es "indeseable". El supervisor financiero cree existen otras vías "más compatibles" con el ordenamiento jurídico y económico para lograr el objetivo que se persigue con esta moneda social: favorecer el comercio de proximidad y los servicios de los barrios.

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