Los socialistas apoyan el plan del Gobierno para reformar el mercado de la electricidad
La economía nacional sigue inestable, y más aun con el actual statu quo político. Los cambios estructurales en la realidad económica de la población española ahora pasan por uno de sus puntos débiles, el que más afecta el presupuesto y las finanzas de las familias; los servicios públicos, específicamente, la tarifa eléctrica. Aunque la recesión no da tregua y el consumo se mantiene en una dinámica de lento crecimiento, la élite socialista que ocupa la coalición gobernante es partidaria de que los cambios en el sistema de proveeduría del servicio eléctrico salgan adelante, muy a pesar de cómo afecta los ingresos de los españoles.
Y es que la facción socialista del Gobierno ha reivindicado y ratificado este martes su apoyo a la "agenda reformista" que el Ejecutivo de Pedro Sánchez mantiene en materia de energía, y ha asegurado que “sigue trabajando para mejorar el funcionamiento del mercado y la protección del consumidor”.
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Esto implica que ahora la administración de Sánchez contará con el respaldo legislativo que necesita en el Congreso para sacar adelante cualquier reforma sobre el mercado energético, el monopolio fiscal-financiero de las empresas proveedoras de energía y la participación del Estado en la captación de ingresos derivados de los pagos de las tarifas.
“En medio de las críticas por la subida de la luz y la exigencia de sus socios de Unidas Podemos de que se cumpla el acuerdo de investidura en lo referente a la electricidad”, señalaron fuentes de Podemos, reseñó El País, en vista del esfuerzo realizado en esta materia por parte del Gobierno.
La electricidad ha sido uno de los grandes asuntos pendientes en la agenda del Gobierno, pues una reforma muy profunda sobre el sector, que afecte la estabilidad socioeconómica de los españoles para cubrir los gastos que demanda ese servicio, podría ser políticamente nociva para una Administración que no enfrenta el mejor panorama de apoyos en vista de la actual crisis económica y las políticas públicas pendientes desde hace años, como el ajuste de las pensiones y el aumento del salario mínimo. @mundiario
