¿Por qué el PSOE se calla ante el escándalo de la privatización de NCG Banco?

Alfredo Pérez Rubalcaba, secretario general del PSOE.
Alfredo Pérez Rubalcaba, secretario general del PSOE.

La democracia española es muy frágil y el sistema que la envuelve, muy perverso. Parece que al PSOE tampoco le inquieta que el Estado pierda ingresos si los gana la banca.

¿Por qué el PSOE se calla ante el escándalo de la privatización de NCG Banco?

La democracia española es muy frágil y el sistema que la envuelve, muy perverso. Parece que al PSOE tampoco le inquieta que el Estado pierda ingresos si los gana la banca.

 

Mariano Rajoy, presidente del Gobierno, tiene en su mano la decisión más importante para Galicia de cuantas ha tenido que tomar en su vida como político. Si él lo consiente, su ministro de Economía, Luis de Guindos, se llevará por delante NCG Banco, incluso a costa de que el Estado pierda ingresos por valor de miles de millones de eurosSi el presidente Rajoy fuese catalán y Novagalicia tuviese su sede en Barcelona todos sabemos que pasaría. ¿O no?

Por su parte, Alfredo Pérez Rubalcaba, líder de la Oposición socialista, o no se entera de nada –cosa rara en él- o está en el mismo juego que Luis de Guindos de defender a la gran banca española en su intento de hacerse con Novagalicia Banco. La democracia española es muy frágil y el sistema que la envuelve, muy perverso.

El silencio del PSOE en Madrid contrasta con la reacción de su secretario general en Galicia, José Ramón Gómez Besteiro, quien lamenta que Galicia sea la única comunidad histórica sin banco propio. En su opinión, es hora de exigir respeto, no de bajar la cabeza.

Alberto Núñez Feijóo, presidente de la Xunta, maniatado por su pertenencia al PP, ha tenido que defender la continuidad de Novagalicia Banco con muchas dificultades para hablar claro. Pero lo ha hecho y lo sigue haciendo a su manera, consciente de que está en manos de Mariano Rajoy.

Otro protagonista es José María Castellano, presidente de Novagalicia Banco. Algunos tal vez se preguntarán por qué lleva tanto tiempo callado, cuando está en juego la propia existencia del banco que preside. No puede hablar. Como presidente de NCG se debe a su consejo, donde manda el FROB, léase Luis de Guindos.

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