Tres productos y marcas que empezaron con propósitos totalmente distintos
La demanda del mercado o el fracaso de la idea inicial han llevado a muchas empresas a cambiar su propósito original.
Muchos de los productos y marcas más famosas del mundo fueron creadas con un propósito muy distinto del que se conoce hoy en día. Es tal el caso de Coca-Cola, que surgió como un medicamento contra el dolor de músculos, o como Samsung, que inicialmente no era más que una venta de pescado en Corea del Sur. Junto a ellas, hay otras tantas empresas y productos que mutaron para convertirse en lo que conocemos hoy en día. A continuación, tres referentes comerciales que giraron su propósito:
1. Kotex
Es una de las marcas principales en productos de higiene femenina. Sus toallas sanitarias empezaron como gases superabsorbentes que eran usadas por los soldados que lucharon en la Primera Guerra Mundial. La empresa que fabricaba estas gasas notó que su invento tenía futuro y decidió convertirlo en los productos femeninos de hoy en día.
2. Kleenex
Estos pañuelos de bolsillo son una gran ayuda cuando ataca una alergia en el momento menos oportuno. Kleenex es la primera de su sector pero cuando inició, sus fabricantes concibieron los pañuelos como un desmaquillador para mujeres. Su uso final no dista mucho del original, cuando menos.
3. Play-Doh
Plastilina no tóxica pensada para los más pequeños de la casa, quienes pueden dar rienda suelta a su imaginación y hacer todo tipo de figuras con ella. No obstante, en los 30’, este producto era en realidad una masa con la que se recubrían huecos de las paredes. No obstante, aquella idea fue un rotundo fracaso, por lo que la empresa debió buscarle un nuevo uso a su creación y la enfocaron a la finalidad que tiene hoy en día. Un cambio necesario y 100% acertado.