Pemex despedirá a 9,000 empleados pero le subirá el sueldo a sus directivos

Pemex, la petrolera estatal de México, está viviendo los peores momentos de su historia. Con el agua al cuello, el Estado ha visto sus cifras reducidas, sus ingresos menguantes y todo en medio de una crisis económica que les tiene en jaque. Pese a todo, la compañía petrolera no se ha inmutado y se ha saltado las recomendaciones del Gobierno de minimizar gastos y para el próximo año contratarán nuevos directivos quienes gozarán de salarios más altos que los que se dan hoy en día. Para eso, se ha despedido a nada menos que 9,000 empleados. Enrique Peña Nieto y su administración continúan luchando por intentar salvar un barco a la deriva y los recortes empiezan a ser solamente segmentados, por lo visto.

Para el año entrante se calcula que la tala será de 12,000 millones de dólares, siendo Pemex la gran afectada pese a que hasta hace nada era la principal fuente de ingreso económico del país. El 42% de este ajuste -es decir 5,000 millones de dólares- se dejará caer sobre la petrolera, que estimó pérdidas de 36,000 millones de dólares tan sólo el año pasado, que elevó la deuda total a 160,000 millones. 

Pemex ha ido tirando al fondo del mar el peso que les hunde todavía más. Pese a que el despido masivo de empleados contratados por subcontratos era tan sólo un rumor, la compañía ha profetizado que despedirá a 9,000 empleados, quienes actualmente gozan de sueldos entre los 600 y 6,000 pesos al mes. Eso sí, los altos cargos aumentarán con todo y salario. Se contratarán 63 gerentes, 26 subdirectores y 10 directores. "Con el barril en mínimos, los problemas financieros, el parón en varias refinerías y la producción registrando un retroceso de más de 20 años, es a todas luces incongruente", asegura el abogado Dante San Pedro. "“De hecho, desde que se iniciaron los ajustes, el gasto en directivos ha subido. Porque no es solo el sueldo del ejecutivo, sino de todo su equipo: asesores, secretarios, choferes. El resto de petroleras desde luego no están incrementando su plantilla", añade. Pemex tiene siete veces más empleados que su homóloga noruega, Statoil. 

Como dejar en la calle a miles de personas no era suficiente, los nuevos altos cargos tendrán salarios que irán entre los 9,000 hasta los 13,500 dólares al mes. La maniobra hace que los salarios de la parte alta del sistema jerárquico no sufra las consecuencias de la crisis económica sino que aumenten en un 4%.

Los dos últimos recortes tienen como contracara la inversión directa del Gobierno Federal, propietario exclusivo de la compañía. La recapitalización de Pemex -que lleva una carga fiscal del 70%- se alza ya a más de 4,000 millones de dólares. 

La caída de los precios del crudo llegó en un momento de inestabilidad e incertidumbre en el país norteamericano. La degradación del valor del peso hizo que se frenaran las inversiones extranjeras, vistas como una especie de penicilina por el Gobierno para la crisis que sufre ahora mismo su economía.

Con todo y que la petrolera es de propiedad pública, la compañía ha impulsado cambios en su estructuración y se ha dividido en dos grandes grupos. Por un lado trabajan el departamento de exploración y división, y por otro el de transformación. Este organigrama ha permitido una excusa a los dueños para crear y promover nuevos puestos ejecutivos. "Al crear más divisiones se incentiva la creación de muchos puestos ejecutivos. Antes del cambio de estructura no existían tantos directores", asegura San Pedro. 

El desplome en la productividad ya hizo rodar la cabeza del máximo directivo de la empresa, Emilio Lozaya. José Antonio González le ha tomado el relevo y, con su fama de ser un mago de las finanzas, tiene el gran reto de revivir una empresa condenada al fracaso. @hmorales_gt