El oro venezolano, la nueva víctima del gobierno de Maduro
Una de las recientes medidas que el mandatario venezolano está promoviendo, es obligar a los venezolanos a ahorrar comprando lingotes de oro al Banco Central de Venezuela, una medida llenas de sombras propiciadas por las mafias que operan en la nación.
Venezuela atraviesa una crisis que ha pasado a ser humanitaria desde hace algún tiempo y la respuesta del Gobierno de Nicolás Maduro ha sido que los venezolanos empiecen a ahorrar en oro. Desde hace unos días el Gobierno venezolano autorizó la venta de lingotes al Banco Central de Venezuela, una medida que no termina convencer a expertos que detallan que en vez de ahorro para el bolsillo de los ciudadanos, lo que busca Maduro es continuar con el fraude de desfalco del oro venezolano.
Actualmente es imposible prever la cantidad de oro que existe en el Arco Minero venezolano, donde se cree que pueden haber alrededor de 8.000 toneladas del metal precioso que equivaldrían a unos 243.000 millones de euros, esto sin tomar en cuenta otros minerales que pueden encontrarse en el rico suelo venezolano como el cobre, el diamante, la bauxita o el coltán. Los yacimientos ocupan hasta un 12% del territorio venezolano, y se han convertido en la última escapatoria del régimen de Maduro para poder financiarse. En el Arco Minero operan mafias criminales que contrabandean los metales preciosos y se encargan de venderlo al exterior, sin que los venezolanos puedan ver algún beneficio.
Los mineros de los metales se han radicado en estados como Bolívar, en las localidades de Utapa y Tumeremo para poder hacerse con los metales preciosos que suelen ser vendidos a países ricos como Dubái. En el país caribeño existe una ley que reserva las actividades de exploración y explotación del oro (y otros minerales) al Estado, por lo que cualquier actividad relacionada con la minería sin el consentimiento del Gobierno está penada por la ley. A pesar de esto, las denuncias sobre la actividad ilegal con el consentimiento del gobierno y militares se han encargado de ocultar los casos.
Una investigación de la Abc habla de los “sindicatos” mafiosos conformados por más de 40.000 personas. En su reportaje, hablan con un informante de la cadena de mando que está desfalcando a la nación. “Los jefes tienen laboratorios donde se analiza el oro por la ley (su pureza), lo funden en hornos y hacen lingotes de medio kilo o un kilo. Después se lo llevan en avionetas privadas hasta Aruba donde lo certifican y lo venden en el exterior por miles de dólares”, aseguró Miguel Martínez, bajo un nombre ficticio.
El informante asegura que a cambio de su silencio, las autoridades involucradas en las mafias piden el 70% de los beneficios de lo que extraen, donde cada lingote puede costar de 20.000 a 30.000 dólares.
Las etnias indígenas han sido desplazadas por grupos criminales, militares venezolanos y grupos guerrilleros que tienen el control de la zona para tomar su parte de la situación. Pocos políticos se han atrevido a hacerse eco de las denuncias al respecto, pero han transcendido detalles del descontrol de las mafias que han llegado a realizar masacres contra los mineros, la más conocida fue la “masacre de Tumeremo” donde fueron asesinados hasta 17 mineros en 2016, un crimen que quedó impune.
Como si no fuera suficiente, el embiste minero para hacerse con los minerales está causando un ecocidio en una zona rica en naturaleza. El impacto ambiental desemboca en la contaminación de los ríos y la deforestación de los bosques en una región llena de Parques Nacionales. Al igual que pasa con el dólar que es utilizado como moneda no oficial de Venezuela, el oro ha pasado a ser otra moneda de cambio llamada grama (por gramo) y es utilizada para la compra de productos. @mundiario
