NCG y Catalunya Banc: Botín, FG y Fainé renuncian al ‘esta para mí, esta para ti’

Emilio Botín.
Emilio Botín, presidente del Banco Santander / Universia.

Novagalicia Banco es la estrella del festín financiero español, mientras que Catalunya Banc hace el papel de fea poco cortejada. ¿Cumplirá Botín en España el evangelio que predica en N.Y.?

NCG y Catalunya Banc: Botín, FG y Fainé renuncian al ‘esta para mí, esta para ti’

En la antesala de las privatizaciones, Novagalicia Banco es la estrella del festín financiero español, mientras que Catalunya Banc hace el papel de fea poco cortejada. ¿Cumplirá Botín en España el evangelio que predica en N.Y.?

Atentos. Desde Nueva York, el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, ha calificado de "fantástico" el momento que atraviesa actualmente la economía española con la vuelta de la confianza de los mercados financieros, lo que está propiciando que "todo el mundo" quiera invertir en el país.

¿Incluye Emilio Botín en el festín a los fondos estadounidenses interesados en comprar Novagalicia Banco? En principio se supone que sí, a juzgar por el entusiasta espíritu de sus palabras, pero a la hora de la verdad ya veremos. Porque Botín es su contrincante y puede tener dificultades para predicar el mismo evangelio a un lado y otro del Atlántico.

El primer banquero de España ya ha confirmado que estudia la compra de Novagalicia Banco, si bien dice que no sabe en qué condiciones pujará, lo cual no es mucha novedad que digamos, pero tal vez lo sea más si le damos contexto a sus declaraciones, nunca improvisadas.

En el sector bancario español ya consta que los bancos descartan la merienda de negros y no admiten pactos de esta para ti (Novagalicia), esta para mí (Catalunya Banc). Botín (Santander), FG (BBVA, el banco amigo del PP) o Isidro Fainé (La Caixa) ya dicen: o yo o Guggenheim. Curioso.

El que no para de reunirse, por cierto, es el presidente de CaixaBank, Isidro Fainé. Le comió la oreja al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para ganárselo con unas baratijas, y después se fue a ver a Mariano Rajoy. Se cruzan muchas sonrisas… Luis de Guindos, siempre muy 'cotizado', se va a poner celoso. ¿O no?

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