Los cuatro mercados emergentes que se han desplomado este año

Argentina, Rusia, Sudáfrica y Turquía hasta hace poco se coronaban como las economías en desarrollo del mundo, o lo que conocemos como mercados emergentes, pero en los últimos tiempos sus respectivas economías se han venido en picado gracias al nerviosismo de los inversores, la inflación en alza y la caída de sus monedas. La situación de estos países dista mucho de lo que pasa en EE UU, donde el dólar sigue sólido provocando un excelente equilibrio que atrae a inversores de todas partes del mundo.

¿Qué pasa? Te lo explicamos a continuación:

Argentina

El ejemplo más llamativo, es quizás, el de Argentina que hasta hace poco fue una de las mayores economías de América del Sur. La economía de Argentina ha sufrido en los últimos años y antes de ser presidente, Mauricio Macri era un conocido empresario, con su elección, los votantes esperaban que creara una buena relación con los inversionistas internacionales para retener la creciente inflación que la expresidenta Cristina Fernández dejó. En 2016, las cosas mejoraron cuando la nación tuvo acceso de nuevo al mercado de bonos, pero esto duró poco ya que en este 2018 luego de que el gobierno no lograra controlar el déficit y bajara la producción de soja y maíz, la economía empezó a desplomarse.

Además de esto, los inversores desde hace años no confían en la economía argentina que ha entrado en crisis en los años 1980, 1982, 1984, 1987, 1989 y 2001. Desde abril de este año, el peso argentino sigue despreciándose y continua con su caída incluso luego de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó un préstamo de 50.000 millones de dólares y que el Banco Central aumentara las tasas de interés a un increíble 60%.

Rusia

Los problemas económicos que enfrenta este país se deben principalmente a las acciones políticas que ha emprendido el presidente Vladimir Putin. Los problemas de Rusia comenzaron con EE UU y durante el gobierno de Barack Obama que tomó acciones contra el Kremlin luego de su injerencia en Ucrania y después por su apoyo al presidente sirio Bashar al Asad. Milagrosamente, Donald Trump ha mantenido las sanciones que incluso han incrementado durante su mandato luego de la expulsión de varios diplomáticos rusos, el envenenamiento del exespía ruso y su hija en Reino Unido y el comercio que mantiene con Corea del Norte a pesar de las sanciones de la ONU. Por lo anterior, muchas naciones europeas también le han dado la espalda a Rusia, por ende, su economía ha ido cayendo.

En lo que va del año, el rublo ha perdido el 18% de su valor a medida que los inversionistas se alejan a causa del aislamiento de Rusia, no solo a nivel político, sino a nivel económico. La moneda y las importaciones caen, algo que jamás será bueno para una nación.

Turquía

Los datos del FMI expresaban que este país vivió un gran aumento de crecimiento y desarrollo durante la década pasada. Los registros se concentraban en el aumento del 6,8% desde el 2010; pero este asunto tenía truco y es que las empresas se impulsaban a través de bonos en dólares y euros. Algo por lo que también optó el gobierno del presidente Recep Tayyip Erdogan que aumentó el gasto de subsidios a proyectos de infraestructura. Debido a que el dinero prestado era en otras monedas, la lira turca ha experimentado una gran caída en los últimos años ocasionando que la inflación siga aumentando.

Sumado a lo anterior, desde que Erdogan ganó las últimas elecciones, los inversionistas se han mostrado más escépticos ya que ha empezado a asumir ciertas facultades a nivel político y económico que antes no le incumbían, según reseñan desde The New York Times. Designó como ministro de Finanzas a su yerno y ha emprendido ciertas decisiones políticas que generan desestabilidad en la nación. Asimismo, luego de que Trump duplicara los aranceles a las importaciones de acero y aluminio turcos los inversionistas decidieron retirarse del país. Los expertos auguran que dentro de poco la nación entre en recesión gracias a la caída de un 40% de la lira con respecto al dólar y es probable que varias empresas se declaren en quiebra.

Sudáfrica

Un país donde la tasa de desempleo está sobre el 27% y la uno de cada cuatro habitantes vive en pobreza extrema, reseñan en The New York Times. Hace años el panorama fue diferente gracias a la inyección de capital de inversionistas ricos, que poco a poco fueron yéndose de la nación gracias a la mala administración de parte del gobierno que invirtió casi exclusivamente en el gasto social. El rand, la moneda sudafricana, bajó este año hasta el 18% y según los expertos, Sudáfrica ya se encuentra en recesión. @mundiario