La guerra comercial entre EE UU y China se hace tecnológica, fría y geopolítica

Xi Jinping, presidente de China y Donald Trump, presidente de Estados Unidos. dw.com
Xi Jinping, presidente de China, y Donald Trump, presidente de Estados Unidos. / dw.com

La marginación de Huawei en EE UU obliga a China a ser más autosuficiente. Donald Trump, presidente de EE UU, intenta ponerle puertas al campo.

La guerra comercial entre EE UU y China se hace tecnológica, fría y geopolítica

Por poco, a Andrew Grove (1936-2016) no le dio tiempo a ver lo que pasa entre EE UU y China, aunque él lo vio venir hace 14 años, cuando presidía Intel. Debido al ascenso de China y la India, ya alertó entonces de los riesgos de la globalización para EE UU, convencido de que no solo rebajaría las retribuciones de sus empleados, haciendo más marginal su producción, sino que transformaría los trabajadores del conocimiento, los que encarnaban –y encarnan– la ventaja competitiva de EE UU, en otra mercancía global.

La guerra comercial entre EE UU y China se hace tecnológica, fría y geopolítica y amenaza con quedarse, especialmente en el plano tecnológico con el 5G como telón de fondo. La marginación de Huawei en EE UU obliga a China a ser más autosuficiente. Donald Trump, presidente de EE UU, consciente de que frente a Apple está Huawei; frente a Google, Baidu; frente a Amazon, Alibaba, y  frente a Uber, Didi, intenta ponerle puertas al campo, de momento desde una posición más fuerte de incierto futuro. Los chinos siguen creciendo. 

Mientras, la Unión Europea es la primera potencia comercial pero no tiene política ni un sistema de defensa propio. Frente a EE UU y China, se queda pequeña, y Alemania más. ¿Queda margen a estas alturas para seguir pensando, desde Berlín, en más Europa? @mundiario

Comentarios