Greenpeace asegura que el acuerdo comercial entre la UE y Japón significa un retroceso ambiental
La ONG ha denunciado que el acuerdo no hace el mínimo esfuerzo por corregir los problemas detectados en la Evaluación del Impacto sobre la Sostenibilidad del JEFTA.
Greenpeace, señaló este sábado que el acuerdo comercial entre la Unión Europea y Japón, conocido por las siglas JEFTA, se está gestando con "una total falta de transparencia" y supone un "grave retroceso medioambiental".
La organización ambientalista publicó un borrador de más de 200 páginas referentes a un acuerdo comercial que actualmente negocia la UE con Japón y acusó a Bruselas de no exigir a su socio garantías suficientes para la protección de los bosques y de las ballenas, y de ignorar asuntos como la importación de madera ilegal. Entre otras cuestiones, la ONG critica con ahínco que la UE solo se ha limitado a "exhortar” a Japón a que luche contra el comercio ilegal de madera, flora y fauna, sin solicitarle formalmente que se tomen medidas concretas.
El análisis presentado por Greenpeace sobre el texto filtrado hace además hincapié en la reformas para corregir los problemas detectados en la Evaluación del Impacto sobre la Sostenibilidad del JEFTA.
Mediante un comunicado, Greenpeace declaró que los documentos expuestos “revelan el fracaso de la UE para promover altos estándares medioambientales a través de su política comercial”. “Lo que esta nueva filtración confirma es que este tipo de acuerdos (CETA, TTIP, JEFTA) se están negociando de espaldas a la ciudadanía. Más allá de los aspectos técnicos del texto, hay un grave problema de democracia y transparencia en estas negociaciones”, declaró Miguel Ángel Soto, portavoz de Greenpeace España.
Para Greenpeace, esta nueva generación de acuerdos comerciales y de inversión no solo ponen en riesgo las cruzadas sociales y ambientales, sino que el nuevo modelo de gobernanza mundial que proponen va en sentido contrario al cumplimiento de acuerdos multilaterales como el de París, el Convenio de Diversidad Biológica o los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, significando con ello un grave retroceso ambiental.
La polémica a raíz de la filtración de los documentos por la ONG, llega a España tan solo unos días después de que el PSOE anunciara un debate sobre el cambio de su postura respecto al CETA, un tratado comercial de la UE y Canadá, cuya ratificación en el Congreso primero respaldaba (igual que hizo en Bruselas) y hora es posible que se abstenga. Dicho tratado será votado en el Congreso de los Diputados el próximo jueves 29 de junio y según han comunicado diversos responsables del partido, incluido su Secretario General, será este lunes 26 de junio cuando miembros del PSOE establezcan su postura respecto a la venidera votación.
