Galicia produce vinos, pescado, textil y cerveza que exporta desde otras comunidades
Puro surrealismo económico. Sus vinos no salen desde puertos gallegos, sino desde Bilbao; se exporta e importa pescado y marisco desde el aeropuerto de Vitoria; el grueso del textil se distribuye desde Zaragoza y otras poblaciones, y la cerveza tampoco pasa por el puerto coruñés, ya que sale en camiones.
El surrealismo económico no solo se da en Galicia, en el noroeste de España, pero su elevada dosis no pasa inadvertida. Si bien la clase política –Gobierno y Oposición– no suele reparar en este tipo de situaciones, profesores universitarios consultados por MUNDIARIO atestiguan que Galicia produce vinos, pescado, textil y cerveza que exporta desde otras comunidades autónomas.
En Galicia, el surrealismo económico llega al extremo de que el pescado no siempre se exporta o importa desde Galicia –comunidad líder en pesca en la Unión Europea–, sino desde el aeropuerto de Vitoria - Gasteiz, a 600 kilómetros del de A Coruña, pero bien equipado de cámaras frigoríficas. Foronda está homologado como Puesto de Inspección Fronterizo (PIF).
Ni siquiera los vinos de Galicia –cada vez mejores y más cotizados internacionalmente– salen desde puertos gallegos, sino desde Bilbao, a 636 kilómetros de los viñedos de Rías Baixas.
En el país sede de Inditex, una parte importante del textil se distribuye desde la plataforma logística del grupo de Amancio Ortega en Zaragoza, a la que, además de una en Arteixo (A Coruña), se suman otras en Palafolls, Salient y Tordera (Barcelona), Meco (Madrid), Cabanillas del Campo (Guadalajara), Narón (A Coruña), Elche (Alicante) y Onzonilla (León).
Inditex vive de espaldas al puerto de A Coruña, cuyo aeropuerto también es incapaz de aprovechar el potencial de carga, a pesar de la presencia de la matriz de Zara a unos pocos kilómetros.
Tampoco la cerveza que produce Estrella Galicia en un polígono de A Coruña pasa por el puerto de su ciudad, ya que sale en camiones y cada vez en mayor medida, dado su éxito de ventas, dentro y fuera de España.
A Coruña, un puerto sin contenedores
Esta evidente descoordinación entre las grandes empresas de Galicia y los gestores de sus infraestructuras da pie a que en los puertos de Galicia apenas se mueven contenedores –en contra de la tendencia global– y a que sus tres aeropuertos –A Coruña, Santiago y Vigo– no logren competir con el de Oporto, cuyo puerto también va por delante de los de interés general en Galicia.
En el caso de A Coruña, que tiene un puerto interior y otro exterior, apenas saben lo que son los contenedores y su conectividad es irrelevante, según un reciente estudio de Valencia Port que mide precisamente la conectividad de las 28 autoridades portuarias de España.
El puerto de A Coruña no está en el minucioso informe de Valencia Port porque no tiene conexiones. Es de los pocos españoles que carecen de conectividad, una de las razones de ser de los puertos, ya que supone el establecimiento de conexiones de un puerto a otro. Dicho de otro modo, de no existir navieras que efectúen dicha conexión a través de escalas prefijadas y con buques con capacidad, tanto las ciudades como sus hinterlands quedan desplazadas de la conexión e inserción, ya sea entre rutas o por cadenas de suministro globales.
¿Desidia o ignorancia?
Parece inaudito que la Cámara de Comercio coruñesa, la patronal CEG y el propio Ayuntamiento de A Coruña no reparasen en este concepto tan elemental pero la realidad es la que es. Dramática.
Los tráficos portuarios de A Coruña están condicionados o subordinados a dos peligrosas instalaciones industriales: la refinería coruñesa de Repsol y la térmica de Naturgy en Meirama –en vías de extinción–, ambas altamente contaminantes.
¿Preocupa esta surrealista situación económica en A Coruña? No parece que mucho. Un texto de la Universidade da Coruña (UDC), editado por una revista económica que mide el marketing portuario desarrollado por las 28 autoridades portuarias, constata que el puerto de A Coruña se sitúa en el cuadrante de aquellos que efectúan escasa promoción. En definitiva, A Coruña no posee marca-país ni imagen de marca consolidada y además no tiene conectividad.
La situación de Vigo es menos grave en materia portuaria, pero le falta tamaño. Mueve contenedores, debido a la industria ligada al automóvil, pero sus cifras son todavía modestas.
Para que A Coruña y Vigo tengan algún día grandes puertos deben empezar por asumir que tienen que dar servicio a las empresas de otras comunidades autónomas vecinas, lo cual supone vender mejor sus instalaciones y dotarse de conectividad. Galicia no tiene mercado interno suficiente para levantar sus propios puertos, a diferencia de lo que sucede en Cataluña o en la Comunidad Valenciana, donde ya existen grandes áreas metropolitanas y además seducen a empresas de otras comunidades próximas, con los ojos puestos en Madrid. @mundiario
