¿Existe la conciliación laboral en plena crisis económica y social?

Una mujer embarazada.
Una mujer embarazada.

Largas jornadas, reuniones de última hora o viajes de varios días hacen que cada día sea más complicado ser padre o madre. ¿Podemos conciliar vida familiar y laboral?

¿Existe la conciliación laboral en plena crisis económica y social?

Largas jornadas, reuniones de última hora o viajes de varios días hacen que cada día sea más complicado ser padre o madre. ¿Podemos conciliar vida familiar y laboral? 

Hoy no ha salido a tomar el café para poder salir antes del trabajo y recoger a su hijo. Son las seis y media de la tarde y tendría que estar marchando pero su jefe le ha comunicado que tiene que quedarse para una reunión urgente. Otro día más, toca llamar a la niñera y quedarse más horas en el trabajo. Un tiempo que ya no le pertenece ni tampoco se lo pagarán o devolverán. Es mujer y es la realidad cotidiana a la que se enfrentan tantas personas en un país en el que falta trabajo y sobran parados. Las jornadas se alargan, los derechos se reducen y no queda otra que aguantar porque la amenaza de despido está siempre acechando. Ésta es la situación que miles de madres han querido poner de manifiesto a través del hagshtag #concilia13F y que ha sacudido recientemente las redes. 

La iniciativa surgió a través de El club de Malasmadres, una web nacida como vía de escape de su fundadora, Laura Baena, creativa publicitaria y madre. En ella, una comunidad de más de 250 mujeres de toda España “con mucho sueño y poco tiempo” comparten sus dificultades para ser madres hoy en día.  

Con el lema "Si X no existiera, yo tampoco" decidieron emprender una campaña en la que en pocas horas consiguieron más de 30.000 tweets y 3.000 fotos en Instagram. El hashtag #concilia13F se convirtió rápidamente en trendic tropic. Y es que reivindicar una conciliación real se hace ahora más necesario que nunca,  al verse fuertemente afectada por la crisis.  

Lanzarse a la maternidad en plena crisis

Miles de parados, contratos de pocas horas, contrataciones en base a subvenciones o en prácticas y ¿cuándo se está preparado para ser padre? No hay nada estable que incite la natalidad y el que se arriesga a ser padre con menos de 30, es sin duda un héroe. 

Según la última estadística del INE, la edad media para la maternidad en España se sitúa en los 31,8 años, una décima más que el año anterior. Los factores no ayudan a bajar esa cifra y las políticas públicas actuales no apoyan a las pequeñas empresas para que las madres no sean un problema dentro de la organización. 

El simple hecho biológico de ser madres trae consigo una discriminación velada que hace que la mayoría de las trabajadoras embarazadas opten por ocultar su embarazo el máximo tiempo posible. Lo hacen por miedo a marginaciones en ciertos proyectos, represalias en cuanto a ascensos o incluso por temor a perder el puesto de trabajo. 

Estando así la cosa, hay quien ya lo ve de otra forma. El perfil medio del trabajador de veintitantos es el que ha pasado por múltiples empleos que poco o nada tienen que ver con sus estudios y sin ninguna estabilidad. Si antes se esperaba a tener cierta seguridad laboral para tener hijos, hoy el reloj biológico hace lanzarse al vacío a muchos de nuestros jóvenes. Con el apoyo de los padres y la dejadez de las políticas públicas, poder tener hijos se está convirtiendo en un privilegio. 

Comentarios