La entrega de comida a domicilio ahora es robotizada en Europa y EE UU
Empresas como Just Eeat incluyen en su catálogo de servicios repartidores autónomos para llevar las órdenes a sus clientes. La novedad ya se practica en varias ciudades europeas.
65 robots producidos por la empresa Starship Techonologies se encuentran ya a disposición en 58 ciudades (40 europeas) en 16 países del planeta para que ejerzan como repartidores a domicilio. Estos innovadores repartidores han recorrrido alrededor de 12,000 kilómetros en total. "Todo sin incidentes", dice orgulloso Allan Martinson, director de operaciones de la empresa con raíces en Estonia, la cual fue iniciada por dos de los cofundadores de Skype.
Los artilugios eléctricos miden apróximadamente 40 centímetros de alto, tienen seis ruedas y están equipados con la misma tecnología que los autos autónomos. Cuentan con nueve cámaras, dos canales de audio, sensores de movimiento, señal de GPS y un sistema de mapeado. Son totalmente independientes mas tienen operadores remotos que pueden tomar el control en cualquier instante. "Los estamos probando bajo control humano. Necesitamos avanzar más para llegar a una capacidad de autoconducción perfecta", dice Martinson.
Just Eat, la compañía más grande en Europa en la industria de la comida a domicilio, es la primera empresa en invertir en esta tecnología. Ya en julio avisó que habían firmado un trato con Starship Techonologies y tras cinco meses de pruebas, para diciembre han hecho ya sus primeros repartos en Greenwich. Para 2017 esperan ampliar este recurso a todo Londres y su propósito definivito es "tener una flota de robots en múltiples vecindarios de Gran Bretaña".
Por otra parte, pero en colaboración con la empresa europea, la ciudad de Redwood City en California, Estados Unidos, contará con 20 robots para principios de 2017, encargándose de la entrega de comida a domicilio o de libros de la biblioteca. Este proyecto es parte de uno más grande que está en etapa piloto por nueve meses entre esa ciudad y Starship Technologies, que planea expandirse a Washington D.C. "En el futuro, habrá miles y miles de robotos en miles de ciudades de todo el mundo haciendo repartos por un dólar o menos", asegura Henry Harris-Burland, portavoz de Starship.
Solicitar un robot desde la app
Los robos de Just Eat cuentan con un proceso de reparto tan sencillo como el de los humanos. El cliente solicita la comida en la aplicación y la recibe en la puerta de su hogar. El pago se hace por medio de la aplicación. Para poder sacar el paquete, el usuario tiene un código que le es enviado por mensaje de texto. El código se introduce en el aparato y éste abre su tapa.
La aplicación, como sea, no permite que sea el usuario el que solicite el servicio del robot, pero los clientes son informados sobre si será uno de estos artilugios el que llevará su orden. Lo cual deja la puerta abierta a negativas de usuarios.
Estos robots soportan cargas de hasta 10 kilogramos o tres bolsas de la compra a una velocidad máxima de 6 kilómetros por hora, parecido al paso humano ya que todo el trayecto lo realizan en aceras (llevan un banderín amarillo o rojo para que sean visibles). El propósito es cubrir un radio de tres a cinco kilómetros, lo que les puede llevar enter 15 y 30 minutos, más de lo que tarda un reparto en moto o bicicleta y parecido al que Amazon planea para sus drones. El aparato llega al domicilio en el mismo tiempo que se tardó la comida en ser preparada.
Una de las preocupaciones que cundía al inicio del proyecto era la reacción del público con los robots. No obstante, los creadores de la empresa han admitido que lo más "sorprendente" ha sido la "falta de reacción", pese a que los niños les encanta y "tratan de cazarlo y abrazarlo, uno incluso trato de darle de comer una banana". Todavía no han tenido que enfrentarse a ningún caso de vandalismo, pero si se da, el roboto tiene una alarma en caso de que alguien intente robarlo. @hmorales_gt
