Un enfoque regional de la economía

Mapa
Mapa

La globalización es un fenómeno no generalizado, desigual y que deja a la vista diferencias insalvables interregionales que impiden el desarrollo y la integración económica.

Un enfoque regional de la economía

La llamada Economía Regional es un concepto teórico de modelo económico de épocas pasadas y que quedó en desuso en las potencias mundiales a finales de los años 70. Se trata de un modelo basado en el desarrollo de la región espacial donde se desarrolla la actividad productiva.

La economía es una ciencia que en su finalidad pretende responder a las preguntas de qué, cómo y para quién producir, mediante la asignación eficiente de los recursos, creando riqueza y con el fin de satisfacer las necesidades humanas. La economía regional, además, incluye la premisa del dónde, es decir, dándole un mayor énfasis a la localización, a la ubicación de la actividad productiva, de hecho, es conocida la importancia de la localización geográfica de un nuevo proyecto empresarial o negocio.

Con las políticas regionales se persigue potenciar las regiones, con el fin que los mercados corrijan los desajustes que existan y crear así sinergias que faciliten el desarrollo de las áreas productivas. Esto va a activar la movilidad de materias primas y recursos al servicio de crecimiento que tienda a la convergencia interregional, resultando regiones más homogéneas y con características más uniformes que faciliten la estabilidad y limiten las fuerzas influyentes.

En el mundo actual, la globalización acapara el centro del estudio económico y de los flujos comerciales y financieros, es el sistema imperante pero que está dejando a la vista desigualdades naturales que existen entre sociedades y que provocan un lento desarrollo del conjunto, son muchas más las variables que afectan directamente al progreso y dificultan la integración de las economías.

La globalización es un fenómeno no generalizado en todas las naciones y que se presenta de manera muy desigual en los diferentes agentes económicos. La economía regional no choca directamente con el concepto de globalización, es otro enfoque de la universalidad de la economía, que explica el desarrollo de un conjunto con el fin de crear bloques económicos regionales, pero de similares características. En esta idea radicó el nacimiento de la Unión Europea, fundada oficialmente por el Tratado de Maastricht en el año 92, aunque ya en la época de posguerra, a lo largo de los años 50, se fueron desarrollando varias organizaciones que acabaron con la fundación de la Comunidad Europea. La cuestión, que cada vez está más en entredicho, es si es apropiado acaparar economías tan diversas bajo unas mismas directrices, un proceso de regionalismo económico a la inversa, hacia abajo, fundando un ente supranacional que engloba a economías dispares, en lugar de desarrollar y focalizar en la región con el fin de alcanzar unas características homogéneas que permitan la orientación a un mismo objetivo.

Es cierto que el sistema regionalista es característico de épocas precisamente de crisis, bélicas como en sus inicios, o también económicas y financieras. Es en tiempos de recesión cuando las diferentes variables afectan de una determinada manera a cada una de las economías, por lo que se hace difícil una respuesta conjunta.

Con el desarrollo de una economía regional se crean corrientes a partir del incremento de la productividad de cada zona, mediante la especialización y la cualificación se promueven los flujos desde un nivel inferior, creando riqueza y fortaleza en un conjunto que ayudará al crecimiento de áreas periféricas, aumentando a partir de ese núcleo y creando una aglomeración o región nodal que repercutirá en industria, innovación y renta. La competitividad interregional facilitará a gran escala el crecimiento económico con mayor simetría y facilitará las relaciones comerciales y flujos financieros a nivel mundial con una base del tejido económico sólida y firme. @mundiario

Comentarios