EE UU está más que duplicando el umbral del salario para las horas extras
Todavía tenemos mucho trabajo por hacer para asegurarnos de que esta economía funcione para todos, no sólo los que están en la cima. Es por eso que nunca dejaré de luchar durante el tiempo que esté en este cargo.
El verano pasado, recibí una carta de una mujer llamada Elizabeth Paredes de Tucson, Arizona. Elizabeth es la mamá de un niño de 3 años de edad, y la subgerente de una tienda de sándwiches. Gana alrededor de $2,000 al mes, y trabaja normalmente unas 50 horas a la semana, a veces incluso más. Sin embargo, debido a las regulaciones de horas extras obsoletas, no le tienen que pagar ni un centavo por las horas extras.
Ella escribió: “No es un trabajo fácil y requiere mucho tiempo lejos de mi hijo, a veces me parece que no vale la pena.”
Cosas como la semana laboral de 40 horas y las horas extras son dos de los pilares más básicos de una vida de la clase media. Sin embargo, por todos los cambios que hemos visto a nuestra economía, nuestras reglas para las horas extras sólo se han actualizado una vez desde la década de 1970. Solo una vez. De hecho, hace cuarenta años, más del 60 por ciento de los trabajadores eran elegibles para las horas extras en función de sus salarios. Pero hoy día, ese número se ha reducido al siete por ciento. Solo el siete por ciento de los trabajadores asalariados a tiempo completo son elegibles para las horas extras en función de sus ingresos.
Es por eso que mi Administración ha dado un paso más para ayudar a los trabajadores a recibir el pago de horas extras que se han ganado. El Departamento de Trabajo finalizó una regla para extender las protecciones de las horas extras a 4.2 millones de estadounidenses. Es un paso que aumentará los salarios de los trabajadores estadounidenses en $12 mil millones en los próximos 10 años. Estamos más que duplicando el umbral del salario para las horas extras. Y lo que esto significa es que la mayoría de los trabajadores asalariados que ganan menos de unos $47,500 al año calificarán para las horas extras. O bien, sus patrones pueden elegir darles un aumento de sueldo a fin de que ganen más de $47,500. O también, si los patrones no quieren aumentar los salarios, pueden dejarles ir a casa después de las 40 horas y ver a sus familias o capacitarse para nuevos puestos de trabajo. De cualquier forma que se mire, es una victoria para las familias trabajadoras. Y nos estamos asegurando de que cada tres años haya una actualización automática de este umbral, para que las familias trabajadoras no vuelvan a caer en el olvido durante décadas nunca más.
Este es el único paso más grande que puedo tomar a través de la acción ejecutiva para aumentar los salarios para el pueblo estadounidense. Esto significa que a millones de estadounidenses trabajadores como Elizabeth o bien se les paga por trabajar más de 40 horas, o conseguirán más tiempo para estar con sus familias. De cualquier manera, ganan. La clase media gana. Y Estados Unidos gana.
Todavía tenemos mucho trabajo por hacer para asegurarnos de que esta economía funcione para todos, no sólo los que están en la cima. Es por eso que nunca dejaré de luchar durante el tiempo que esté en este cargo: para recobrar el sentido de que en Estados Unidos, el trabajo duro debe ser recompensado con la oportunidad de salir adelante.
