Cuba tiene la mejor media entre impuestos y PIB de toda América Latina

Un informe sobre la recaudación de tributos en la región ha dejado ver que la desigualdad en la misma sigue creciendo.
El informe anual de Estadísticas Tributarias en América Latina y el Caribe ha reflejado que la brecha entre ingresos e impuestos para las clases altas de toda la región es cada vez más amplia. De acuerdo al documento, la región recauda un 22.8% del PIB como media, contrastanto con el 34.3% de media en los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), con todo y que la brecha ha bajado en 4.6 puntos porcentuales en los últimos cinco lustros.
"Cuando hablamos de que América Latina debería reforzar su músculo fiscal no es aumentando los impuestos a su clase media, que ya paga una cantidad sustancial, sino revisar las numerosas exenciones fiscales, reforzar los impuestos sobre la renta a los ciudadanos con mayores ingresos y luchar contra la evasión fiscal", dijo Ángel Melguizo, quien encabza la Unidad de América Latina y el Caribe del Centro de Desarrollo de la OCDE. "Si se aumentan más los impuestos sobre las clases medias se corre el riesgo de que pasen a la informalidad y si se aumentan sobre las empresas se dificultan las inversiones", le cita El País.
La amplia economía en negro es otro de los elementos que los gobiernos latinoamericanos tienen que frentar si quieren abastecer debidamente sus respectivas arcas y contar con recursos suficientes a fin de aplicar políticas de desarrollo en áreas como la educación, salud e infraestructura, cita la periodista Mar Centenera. A día de hoy, al menos 55 de cada 100 trabajadores de toda la región tiene un empleo en negro. Esa informalidad conlleva riesgos para los ciudadanos menores y también para la clase media emergente, y de paso es también una ayuda para las empresas, pues pagan menos impuestos en relación a sus beneficios, según asegura el directivo de la OCDE.
Márgenes entre regiones
Cuba pasa de largo la media de la OCDE, pues su ratio de ingresos tributarios y PIB llega al 38.6%. No obstante, lo de la isla es solamente una excepción. Dentro de los 24 países que fueron sometidos al estudio, los que vienen detrás de Cuba son Argentina Brasil, con un 32.1% y 31%, respectivamente. Otras grandes economías latinoamericanas están muy lejos, como por ejemplo la mexicana, con un 17.4% o la chilena, con un 20.6%. Al fondo del ránking quedan Guatemala con un 12.4% y República Dominicana con el 13.4%.
Pese a que Latinoamérica todavía tiene mucho camino por delante, este informe apunta que entre 1990 y 2015 se reportaron varios avances en la zona debido a que hubo "condiciones macroeconómicas favorables, cambios en el diseño de los sistemas tributarios y un fortalecimiento de las instituciones", de acuerdo al texto que concluye el análisis. Durante esos 25 años, la región aumentó la recaudación impositiva en más de siete puntos porcentuales y la brecha con la media de la OCDE bajó en 11.4 puntos porcentuales, un recórd histórico.
Los ingresos públicos por impuestos a la extracción de hidrocarburos y minería han reportado una notable caída en los aparatos económicos de toda la región, pues pasaron de ser el 8.7% del PIB al 2.8% del mismo. No obstante, según cita el mismo diario a Melguizo, "los sistemas tributarios en la región han mostrado una destacable resiliencia, gracias al aumento de impuestos al consumo".
El principal caudal de ingresos tributarios en las economías de la región son los impuestos indrectos, distinto de la OCDE, donde el 60% de los ingresos viene de impuestos directos, especialmente el impuesto a la renta y contribuciones a la seguridad social, sigue Centenera. Esa repartición hace más grande la brecha de la desigualdad en toda América Latina, pues el impuesto mantiene el principio de que entre más se gana, más se tributa, en tanto que los impuestos al consumo -el IVA es el más popular de éstos- se pagan por igual, independientemente de cuáles sean los ingresos de cada individuo.
Aquellas estadísticas representan la media regional y presentan serias diferencias entre los países. El País, explica con el ejemplo del impuesto a la renta a las personas físicas es un 0.9% de los ingresos tributarios en Bolivia, en tanto que en México el mismo concepto le recauda el 19.7% del total a las arcas públicas. Sea como sea, la región padece del mismo mal: los constantes fraudes a las equivalentes a Hacienda en cada país. Según el Banco Interamericano de Desarrollo, cierra el mismo diaio, "más de la mitad del potencial de recaudación del impuesto (sobre la renta de personas) se pierde a través de la evasión" en toda la región.