La crisis económica venezolana obliga a Cuba a gestionar cómo subsistir
La situación no es tan alarmante como cuando se produjo la caída de la URSS pero exige que la diplomacia cubana encuentre otros países amigos para cubrir el vacío que va dejando Venezuela en la isla caribeña.
La crisis económica venezolana está obligando a Cuba a gestionar cómo subsistir. La situación energética no es tan alarmante como cuando se produjo la caída de la URSS pero exige que la diplomacia cubana encuentre otros países amigos –tal vez Argelia y Rusia– para cubrir el vacío que va dejando Venezuela en la isla caribeña. La clave: la disminución del suministro de petróleo que Venezuela –país sumido en una profunda crisis económica y política– entrega a Cuba con facilidades de pago.
Expertos citados por el diario El Nuevo Herald de Miami cifran la disminución de los envíos de petróleo venezolano en el 40% de los cerca de 100.000 barriles diarios que Caracas suministraba a La Habana desde hacía más de una década. A mayores, la caída de los precios de las materias primas y las dificultades de otros socios de Cuba como Brasil también dificultan la situación.
Cuba crecerá menos y tendrá que reducir su producción energética. Si entra o no en recesión es algo que no está confirmado, ya que de momento Cuba mantiene su PIB en positivo. Cuba produce el 45% de sus necesidades de petróleo, pero el crudo cubano es pesado y solo puede usarse en la generación eléctrica y la producción de derivados.
