Cataluña recauda casi la mitad del Impuesto sobre el Patrimonio en España y Madrid nada

Rascacielos en Madrid. / Mundiario
Rascacielos en Madrid. / Mundiario

Es evidente que el esfuerzo fiscal ha dejado de ser homogéneo entre los territorios que componen España, por lo que se impone una reforma en profundidad de los tributos que gravan la riqueza. En general, las grandes fortunas españolas eluden pagar impuestos sobre la riqueza.

Cataluña recauda casi la mitad del Impuesto sobre el Patrimonio en España y Madrid nada

La construcción del Estado autonómico, bajo un patrón de federalismo asimétrico, ha convertido las comunidades autónomas en las gestoras de las políticas básicas del Estado de bienestar. Esto determina la necesidad de dotar un sistema de financiación suficiente que garantice la obtención de los recursos necesarios para ejercer las competencias que se han ido descentralizando. Autonomía tributaria, suficiencia financiera y equidad fueron los ejes que propiciaron el traspaso de nuevas capacidades normativas en los tributos cedidos en el 2009, entre ellos, los que gravan la riqueza. La cesión del Impuesto sobre Patrimonio y el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones permite, al menos, a los entes regionales concretar el mínimo exento, la tarifa y la aplicación de deducciones y bonificaciones sobre la cuota. 

De manera paralela a la descentralización de competencias, la crisis económica fue haciendo mella en las desigualdades sociales. Un reparto sesgado del excedente empresarial entre el trabajo y el capital ha derivado en una concentración de riqueza todavía mayor que la registrada hace una década, lo que se compadece con una evolución creciente del índice de Gini. Es precisamente la desigualdad la que justifica la existencia de impuestos redistributivos, que ayuden a paliar el determinismo intergeneracional, aunque su evolución real parece responde más a cuestiones políticas que técnicas. No hay más que ver qué está ocurriendo con el Impuesto sobre el Patrimonio. Con una concentración evidente de la riqueza en Madrid y Cataluña, la recaudación del impuesto se compadece mal con esta realidad. 

Distribución del patrimonio total por comunidades autónomas

(En millones de euros) 

Distribución del patrimonio total por CC AA, en millones de euros. / Mundiario

Fuente: Ministerio de Hacienda

La inhibición fiscal que practica la Comunidad de Madrid –a través de una bonificación del 100% de la cuota– da como resultado que se exima del pago del impuesto a los contribuyentes residentes, independientemente de su patrimonio. En La Rioja esta bonificación asciende al 75% y muy lejos de esto, otras como Cataluña, Galicia o Baleares aplican incentivos a actividades puntuales y concretas –propiedades forestales, participación en empresas de nueva creación, cooperativas agrarias, etc.–, con mucho menos impacto en la recaudación. 

Recaudación en % del Impuesto sobre Patrimonio según el último dato liquidado (2017)

Recaudación en % del Impuesto sobre Patrimonio según el último dato liquidado (2017). / Mundiario

Fuente: Ministerio de Hacienda

El resultado, salta a la vista: mientras Cataluña recauda casi la mitad del total nacional por el Impuesto sobre el Patrimonio, Madrid ha decidido recaudar 0 euros. O lo que es lo mismo, mientras el mayor tipo impositivo medio lo tiene la Comunidad de Madrid, el efectivo se reduce a cero. Es decir, en la práctica Madrid ha eliminado el impuesto y renuncia a recaudar más de 1.000 millones de euros anuales –lo equivalente a la financiación de sus universidades públicas–, comportamiento que parece quiere seguir La Rioja.

Tipo impositivo medio y tipo impositivo efectivo

Tipo impositivo medio y tipo impositivo efectivo. / Mundiario

Fuente: Elaboración propia a partir del Ministerio de Hacienda

Esta situación de injusticia –y ya veremos si también objeto de posible inconstitucionalidad– que se vive en los distintos territorios erosiona no solo la conciencia fiscal de los contribuyentes sino el principio básico de equidad horizontal, que alienta prácticas elusivas y evasivas. ¿Cómo sino se puede explicar que mientras el número de grandes fortunas –aquellas que superan los 30 millones de euros– se han triplicado durante la crisis, el número de estos contribuyentes se ha reducido a un tercio en el Impuesto de Patrimonio?

Evolución de las grandes fortunas y su contribución al Impuesto sobre Patrimonio

Evolución de las grandes fortunas y de su aportación por Patrimonio. / Mundiario

Fuente: Elaboración propia a partir del Ministerio de Hacienda.

Es evidente que el esfuerzo fiscal ha dejado de ser homogéneo entre territorios y se impone una reforma en profundidad de los tributos que gravan la riqueza. Y, aunque no se espera un movimiento en la línea del que han encabezado un grupo de 19 multimillonarios norteamericanos que publicaron una carta en la que pedían que se les impusiera un impuesto moderado sobre la fortuna de una décima parte, al menos cabe agitar la vasija de la reflexión como lo viene de hacer el encuentro organizado por RIFDE y dirigido por Santiago Lago-Peñas y Jorge Martínez-Vázquez en Galicia sobre los “Desafíos pendientes de la descentralización en España: suficiencia y autonomía tributaria”, donde participaron además de los autores del estudio que aquí se reseña –María Cadaval y Alberto Vaquero–, otros como Ángel de la Fuente, Laura de Pablos, Francisco Pérez, Antoni Zabalza, Maite Vilalta, José María Durán o Guillem López Casas Novas.

Las propuestas están encima de la mesa, pero ya lo decía Milton Friedman: “no hay nada más permanente que un programa temporal del gobierno”, habrá que esperar a ver si alguien recoge el guante. @mundiario

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