Las aseguradoras garantizan que asumirán el coste de la epidemia para 10 millones de españoles
La crisis sanitaria mundial ha distorsionado lo que venían siendo las dinámicas normales, con sus altas y bajas, de todos los sectores de la economía global, en especial la europea. Pero un país donde el coronavirus ha inducido fuertes desequilibrios sociales y económicos por la misma paralización de la movilidad humana debido al covid-19, es España. Si bien el sector aéreo y turístico español son los más afectados, hay uno que busca flotar en medio de este turbulento mar de incertidumbre: las aseguradoras.
Y es que a pesar de la propagación de un virus que ya ha infectado a cerca de 400 personas en España, la red de aseguradoras nacionales, que tiene una cartera más de 10 millones de clientes, han dejado claro que no tienen problema ni escatimarán en atender esos 400 casos de infección, aunque apunta a seguir aumentando a medida que crece el número de casos en el principal foco del brote en territorio europeo: Italia.
Por esa razón, la Unespa, (Asociación Empresarial del Seguro), emitió un comunicado la semana pasada en el que aseguraba que “el sector asumirá los costes que le corresponden derivados de la situación que se genere”, tal y como ocurrió con otros brotes como el del SARS (síndrome respiratorio agudo grave) en 2002 y 2003, la gripe aviar en 2004 y 2006 o la gripe porcina de hace un par de años. Esto implica que el conglomerado empresarial de pólizas de seguro médico en España podría entrar en una fase de contingencia para atender todos los casos mientras que la demanda de atención sanitaria sigue subiendo.
Pese a la crisis, el sistema de salud español no ha colapsado y se mantiene en trabajo continuo con incluso 80 horas seguidas de labor por parte del personal médico de guardia en los centros asistenciales habilitados por el Gobierno para atender la emergencia. Y aunque esa contingencia acarrea un costo fiscal y presupuestario de rango elevado para el Ejecutivo, la administración de Madrid no ha reducido el flujo de financiamiento al sector salud en pleno auge de la epidemia.
“Los asegurados que acuden en la actualidad a un centro sanitario privado de los cuadros médicos de las aseguradoras están siendo atendidos con total normalidad”, afirma la patronal de las aseguradoras.
De esta forma, la crisis se mantiene bajo control, aunque con un estado de alerta permanente en un grado de riesgo de contagio que ya podría elevarse de probable a muy alto, solo que el Gobierno aún no decidido decretar ese ajuste logístico sobre la emergencia.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) no desmiente esta información. “Hay muy pocos casos, pero no hemos detectado ningún rechazo”, aseguró un portavoz de esta asociación. “La enfermedad es de notificación obligatoria. Así se recoge el protocolo de actuación que ha aprobado Sanidad”, continuó el representante de la OCU. @mundiario
