Ana Patricia Botín no acaba de remontar el vuelo del Banco Santander

La presidenta del Banco Santander, Ana Botín. / EP
La presidenta del Banco Santander, Ana Patricia Botín. / EP

Tras el fallecimiento de su padre, el 10 de septiembre de 2014, fue elegida ese mismo día presidenta del Banco Santander. Lleva ya más de dos años al frente del gigante financiero español, cuya cotización desde entonces tocó mínimos este año.

Ana Patricia Botín no acaba de remontar el vuelo del Banco Santander

La hija de Emilio Botín, Ana Patricia, no acaba de remontar el vuelo del Banco Santander. Toda la banca se lanza ahora a robar clientes al Santander tras el comisionazo de la 1, 2, 3. Según El Confidencial, todos los competidores del Santander "se frotan las manos" con las "fuertes comisiones" que va a imponer a las tarjetas. Y van a lanzar "campañas agresivas" para robarle clientes al banco de Ana Patricia.

A los reveses de gestión se suman los bursátiles. Tras el fallecimiento de su padre, el 10 de septiembre de 2014, Ana Patricia Botín fue elegida ese mismo día presidenta del Banco Santander. Lleva ya más de dos años al frente del gigante financiero español, cuya cotización desde entonces tocó mínimos este año. Y si bien repuntó tras hundirse este verano, los accionistas del Santander siguen echando de menos las cotizaciones de los tiempos de Emilio Botín.

Dentro y fuera de España se suceden los problemas para el Santander, que fue objeto de una importante crisis en EE UU, a la que sumó los efectos negativos del Brexit en Reino Unido, uno de sus grandes mercados. Desde EE UU siguen llegando malas noticias. Según Bolsamanía, la próxima burbuja a la que se enfrenta el Santander viene sobre ruedas ya que afecta a los préstamos para la compra de coches, un mercado que ha sido una mina de oro para el grupo bancario español durante los últimos años. La Reserva Federal (Fed) de Nueva York ya ha alertado del peligro y en su informe del 1 de diciembre muestra cómo los préstamos subprime (alto riesgo de impago) para la adquisición de vehículos han aumentado hasta niveles previos a la crisis financiera.

Por sorprendente que parezca, dada la situación de México, el Banco Santander programa su mayor inversión en este país inmerso en la incertidumbre; máxime tras la victoria del republicano Donald Trump, cuya política podría lastrar el crecimiento mexicano. El grupo financiero español anuncia que invertirá en México 735 millones de dólares para modernizar sus sistemas y sucursales.

Comentarios