Zlatan Ibrahimovic denuncia a la FIFA por sus derechos de imagen

Zlatan Ibrahimovic en su versión digitalizada en el juego FIFA 21. / Dexerto
Zlatan Ibrahimovic en su versión digitalizada en el juego FIFA 21. / Dexerto
El delantero del Milan, no tiene constancia de que se le haya pedido permiso para usar su nombre y su cara en el juego, y dejó claro que nunca habría dado permiso a la FIFA para que ganaran dinero con su imagen, por lo que inició una demanda por la defensa de sus intereses por una suma millonaria.
Zlatan Ibrahimovic denuncia a la FIFA por sus derechos de imagen

EA Sports, la empresa que comercializa el juego FIFA 21, uno de los mas populares del mundo, ha compartido un comunicado con la empresa Euromericas Sport Martketing, en el cual aclara la situación actual que tiene un reclamo de derechos de imagen iniciado por el jugador Zlatan Ibrahimovic. La FIFA aseguró que tiene el poder sobre los derechos de imagen de los jugadores y poder registrar sus rasgos en el juego.

Hoy en la industria deportiva y del entretenimiento está instalada una discusión sobre la concesión de licencias de los jugadores a EA Sports FIFA, y esta delegación ha llegado a generar un debate que repercute en todas las redes sociales con un alto impacto.

La FIFA dice contar con los derechos contractuales para incluir el parecido de todos los jugadores actualmente en su videojuego, por haberlos adquirido por licencias directa a través de las ligas, equipos y jugadores individuales. Además, el ente aclara que trabaja con FIFPro para asegurar el poder incluir jugadores en el juego.

En estos casos, los derechos que utiliza de los mismos son de dibujar con semejanzas a los jugadores, en el caso de Ibrahimovic, fueron otorgados a través del acuerdo de club con el Milan de Italia.

Ibrahimovic inició esta puja cuando publico un tweet dejando claro su enojo al comprobar cómo su cara y su nombre aparecen en el juego. El delantero del Milan, no tiene constancia de que se le haya pedido permiso para usar su nombre y su cara en el juego, y dejó claro que nunca habría dado permiso a la FIFA para que ganaran dinero con su imagen, por lo que inició una demanda por la defensa de sus intereses por una suma millonaria.

El sueco alega de que no forma parte de FIFPRO, la organización encargada de representar a los jugadores profesionales en todo el mundo.

Está claro que para desarrollo y gestión del marketing deportivo en las propiedades deportivas y marcas patrocinantes, esta protesta dejó un precedente, especialmente para la futura comercialización de los derechos no solo de este juego, sino de otros productos y servicios del ámbito deportivo. @mundiario

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