Zidane movió su tablero táctico y quedó fuera de la Champions
El técnico del Real Madrid pasó del 4-3-3, el esquema que mejor le ha funcionado, al 3-4-1-2, toda una novedad, y el resultado es catastrófico con un 2-0 merecido ante el Chelsea.
Adiós a la Champions. El Chelsea venció 2-0 al Real Madrid en Stamford Bridge y colocó su nombre en la final de la Champions del 29 de mayo en Estambul, Turquía, donde ya lo espera el Manchester City. Zidane movió su tablero táctico tentado para abrirle un lugar a Eden Hazard y el resultado fue catastrófico.
Que nadie culpe al técnico francés del Real Madrid por darle la titularidad a Eden Hazard, de lo que sí lo harán responsable es de no medir al belga con la misma vara con la que midió a Luka Jovic y a Martin Odegaard.
El análisis es claro. Hazard estaba para jugar y salió de titular en detrimento de Vinícius que la venía rompiendo como delantero junto a Benzema o como extremo, siempre por la izquierda. Esta vez el brasileño fue carrilero por derecha y fracasó, mientras que el aporte de Hazard se resumió en un disparo al minuto 64’ que lo desvió el portero Mendy al tiro de esquina.
El dibujo fue un 3-4-1-2 con Luka Modric como enganche. Toda una novedad alejada del 3-5-2 y el 4-3-3 que eran los esquemas de base, desde donde partía todo el juego merengue. El caso es que el equipo blanco tuvo el 68% de posesión y un 89% en presión de pases, pero eso no fue suficiente. Generó cinco opciones claras de gol la misma cantidad que su rival que anotó dos goles.
Karim Benzema atacante del Real Madrid. / realmadrid.com
Al minuto 28’ anotó Timo Werner en una especie de revancha personal tras perdonar en una jugada clara en el choque de ida, mientras que Mason Mount al 85´ le puso cifras definitivas al compromiso.
Zidane hizo ingresar a Asensio, Mariano Díaz, Rodrygo y Fede Valverde, tres de cuatro con perfil ofensivo pero el problema no era de pólvora si no de engranaje. Se le engatilló el ataque justo cuando menos lo esperaba y está vez no vino nadie al rescate.
Pasó en toda la temporada, Karim Benzema tuvo tres ocasiones claras y el balón no entró, y como son Benzema-dependiente el partido se nubló con el paso de los minutos ahogado en la impotencia de no poder remontar. @mundiario
