Tokio pierde los Juegos Olímpicos

Persona sentada sola en una grada.
Persona sentada sola en una grada.
El comité olímpico internacional y el gobierno japonés ha mostrado un “optimismo moderado” respecto a la recuperación económica que supondrá la celebración de los juegos olímpicos de Tokio en 2021.
Tokio pierde los Juegos Olímpicos

La situación de emergencia sanitaria que la crisis del coronavirus ha creado a nivel mundial está teniendo repercusiones en todos los aspectos sociales y económicos.

También el deporte ha visto afectada su actividad: la cancelación de ligas, la prohibición de realizar entrenamientos y demás ha tenido su mayor ejemplo en la necesaria cancelación de los Juegos Olímpicos de Tokio, que iban a tener lugar este verano en el país nipón.

La decisión de no realizar el evento deportivo de más relevancia de cuantos se celebran en la actualidad se hizo oficial en la última semana de marzo, cuando el Comité Olímpico Internacional y el gobierno japonés llegaron al acuerdo de aceptar lo inevitable y aplazar de manera oficial los juegos hasta el verano del 2021.

Repercusiones económicas y sociales de gran calado

La medida no solo es un motivo para comprender la gravedad de la enfermedad causada por el COVID-19, sino que además suma unas consecuencias económicas y sociales de gran importancia.

La celebración de unos juegos olímpicos es un acontecimiento que aporta beneficios en todos los niveles a la mayoría de países del planeta, que participan con sus mejores deportistas en las diferentes pruebas para subirse al podio y hacerse con las ansiadas medallas de oro.

Esto supone la movilización de cientos de personas que, en este caso, iban a acudir a Japón durante varias semanas: Tokio se iba a llenar de deportistas, entrenadores, fisioterapeutas y las miles de personas que llenan las gradas de los estadios olímpicos cuando se celebran los juegos, cada cuatro años.

Las repercusiones económicas se van a notar de inmediato: cancelaciones de vuelos y hoteles pondrán entre las cuerdas a los profesionales del sector turístico, que van a ver cómo las previsiones de ingresos y ocupaciones de este verano caen hasta casi rozar la inactividad, lo que puede ser completamente perjudicial para el sector e incluso suponer el cierre de muchas empresas relacionadas.

Así lo indican los profesionales del sector de las apuestas y el juego online, que esperaban un gran volumen de negocio en esas fechas gracias a la cantidad de apuestas deportivas que se podrían llevar a cabo en este tipo de citas deportivas. “Afortunadamente, no todos los casinos online son iguales y la mayoría continúa ofreciendo a sus usuarios la posibilidad de divertirse y ganar dinero con sus apuestas en juegos como la ruleta, el póker o el Black jack”, indican desde la dirección de varias de estas empresas.

De hecho, son muchas las personas que están pasando la situación de confinamiento a la que está sometida la mayor parte del mundo para divertirse entrando a distintas salas de casino online y matando el tiempo con estos juegos a tiempo real que ofrecen a los usuarios la posibilidad de sentir la adrenalina que es complicada de conseguir en estos tiempos de apatía y horas muertas en casa.

Optimismo para la recuperación

El comité olímpico internacional y el gobierno japonés ha mostrado un “optimismo moderado” respecto a la recuperación económica que supondrá la celebración de los juegos olímpicos de Tokio en 2021, cuando, creen, toda la sociedad japonesa y mundial se volcará para que sea una de las olimpiadas más importantes de los últimos años.

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