Riazor rindió homenaje a Mauro Silva, referente de la era Lendoiro en las leyendas del club

Homenaje de Riazor a Mauro Siva. / Cuatro
Homenaje de Riazor a Mauro Siva. / Cuatro

El Deportivo de La Coruña todavía no adoptó ninguna medida para recordar los títulos y éxitos deportivos que, bajo la presidencia de Augusto César Lendoiro, logró en España y en Europa.

Riazor rindió homenaje a Mauro Silva, referente de la era Lendoiro en las leyendas del club

El Deportivo de La Coruña rindió homenaje al campeón del mundo Mauro Silva, aprovechando su presencia en Riazor, tras haber sido el jugador más votado en la elección de las 10 leyendas del club deportivista, donde jugó 458 partidos.

Ocho de los diez elegidos pertenecen a la etapa en la que Augusto César Lendoiro fue presidente del Deportivo.

Los dos más votados fueron el ya mencionado Mauro Silva y Bebeto –estos dos brasileños fueron la base del Súperdepor que sorprendió al mundo y que acabó consiguiendo el primer título oficial para el Deportivo, la Copa del Rey del año 1995–, seguidos de Valerón, Djalminha, Fran, Donato, Makaay y Manuel Pablo, ya más asociados con los triunfos en la Liga y en la Champions, y de Juan Acuña y Luis Suárez, éste último el único futbolista español de la historia galardonado con el Balón de Oro, aunque por aquel entonces ya no pertenecía a la disciplina del Deportivo.

Lendoiro con los trofeos de los principales títulos del Deportivo. / MarcaLendoiro con los trofeos de los principales títulos del Deportivo. / Marca

De la etapa de Lendoiro, la mejor de la historia del Deportivo, solo han logrado algún reconocimiento el exentrenador Arsenio Iglesias –tiene un busto en el paseo marítimo– y el propio club, que da nombre a una avenida periférica

A pesar de que casi todas las leyendas reconocidas por el deportivismo son producto de los fichajes de Augusto César Lendoiro y de que los seis títulos oficiales del Deportivo también pertenecen a la mitificada era Lendoiro, el Deportivo de La Coruña todavía no adoptó ninguna medida para recordar los títulos y éxitos deportivos que, bajo la presidencia de Augusto César Lendoiro, logró en España y en Europa.

Tampoco el Ayuntamiento de A Coruña le ha hecho a Lendoiro ningún reconocimiento en las calles de la ciudad o en otro tipo de espacio público.

De la etapa de Lendoiro, la mejor de la historia del Deportivo, solo han logrado algún reconocimiento el exentrenador Arsenio Iglesias –tiene un busto en el paseo marítimo– y el propio club, que da nombre a una avenida periférica de la ciudad. Ahora, de una manera más modesta, también Mauro Silva.

"A lo largo de estos 25 años ha habido momentos inolvidables. Los cinco años consecutivos en la Liga de Campeones o los impensables títulos conseguidos son el mejor ejemplo de ello. Pero al mismo tiempo, también hemos pasado situaciones difíciles y duras", admite Augusto César Lendoiro en su balance de gestión, parte del cual ha sido investigado por Hacienda y la justicia.

Marquesina en Riazor. / Mundiario

Minúsculos círculos en unas marquesinas para todos los títulos del Deportivo. / Mundiario

En una medida sin precedentes entre los equipos campeones, el Deportivo redujo todos los títulos de la era Lendoiro a unos minúsculos círculos en unas marquesinas, cuyos detalles solo pueden apreciarse a corta distancia

Lejos de cualquier homenaje o de prestarle ayuda en su defensa jurídica, el consejo del Deportivo de La Coruña decidió retirar las lonas que envolvían el estadio de Riazor con fotos históricas acompañadas de datos sobre el palmarés del club, que en materia de títulos se reduce al mandato del ex presidente Augusto César Lendoiro. De paso, éste también desapareció de las fotos de los tiempos de gloria en la Liga y en la Champions.

Quedan en las vitrinas del Deportivo sus títulos: los del noveno club español en conseguir un título de Liga (entre los 61 equipos que en algún momento han alcanzado la máxima categoría), a lo que suma dos Copas del Rey y tres Supercopas de España.

En una medida sin precedentes entre los equipos campeones de Liga, el Deportivo ha reducido todos los títulos de la era Lendoiro a unos minúsculos círculos en unas marquesinas en Riazor, cuyos detalles solo pueden apreciarse a muy corta distancia.

Comentarios