Las cinco remontadas más épicas en la Liga de Campeones

La Liga de Campeones es la competición de clubes favorita de cualquier aficionado al fútbol, entre otras tantas cosas, por sus remontadas épicas. Esa es la gran ventaja con que cuentan las competiciones con formato de eliminatorias directas, en las que un parpadeo en el momento equivocado puede cambiar la suerte de un equipo. Para las semifinales de esta semana, tanto Tottenham como Liverpool necesitan sendas remontadas ante el Ajax y el Barcelona respectivamente, y a continuación cinco antecedentes para que sus seguidores se animen a creer en lo imposible:

1. Deportivo La Coruña vs. AC Milán

Era la temporada 2003-2004 y pese a que muchos jóvenes aficionados de hoy en día no lo creerán, en aquella época estos dos equipos imponían respeto en sus ligas locales y competían dignamente en Europa (en el caso del Milán ganaba). Como sea, el partido de ida lo ganó el equipo rossonero por 4-1, dejando a los gallegos severamente heridos para la vuelta en su cancha.

No obstante, para el partido de vuelta el super Depor tuvo un ataque de equipo grande y tardó apenas 45 minutos en empatar el global. El éxtasis llegó cuando, en el minuto 76, Fran González marcó el 4-0 y con eso se culminó la remontada al equipo que, a la sazón, defendía el título.

2. Real Madrid vs. AS Mónaco

En la misma temporada y prácticamente en simultáneo a la hazaña del Deportivo, el Real Madrid se la pegaba contra un casi desconocido AS Mónaco. El equipo blanco hizo los deberes ganando 4-2 el partido de ida. Nada hacía pensar el desenlace.

El partido de vuelta en el principado se salió de control para los blancos. Con su exjugador Fernando Morientes, uno de los principales responsables de la llamada clausula del miedo con la que el Madrid se asegura que sus exjugadores no puedan jugar contra ellos, guió a los suyos a una voltereta de 3-1. Aquello empezó a marcar el inicio del fin para los Galácticos. El entonces nueve veces campeón de Europa naufragaba a lo grande en Mónaco y se apuntaba una remontada en contra de las que usualmente ellos eran los protagonistas.

3. Liverpool F.C. vs. AC Milán

Tal vez la madre de todas las remontadas. Es que al Milán de verdad le pasaba de absolutamente todo hasta hace algún tiempo y este partido lo demuestra. Y lo que es más, le pasó en la final, ni tan siquiera en una ronda eliminatoria.

Ganaba al mediotiempo el equipo italiano por un cómodo 0-3. La final parecía definida. Sin embargo, justo al descanso algo hizo Rafa Benítez, entrenador red entonces, y a la vuelta del intermedio su equipo tuvo un ataque de súper héroes. En menos de 15 minutos, con goles de Gerrard, Smicer y Xabi Alonso, el equipo empató y forzó la prórroga. Los 30 minutos extra dejaron todo igual y en penales los británicos terminarían alzando la orejona. Una final para la historia.

4. F.C. Bayern vs. Manchester United

Otra para la historia, aunque el hecho de que no haya sido una goleada como la anterior del listado le quita un poquito de genialidad. Como sea, seguía siendo una final entre dos colosos del fútbol europeo y mundial.

El Bayern se adelantaba al minuto 5 con gol de Mario Basler y durante 85 minutos el ogro bávaro fue campeón continental con absoluta comodidad. Nadie, absolutamente nadie hacía presagiar el caos que se desataría ya ni siquiera en el último minuto, sino en el tiempo agregado.

Dos jugadas del United en el 90+1 y 90+3 acabaron en goles de Teddy Sheringham y Ole Gunnar Solksjaer. De la absoluta nada, de golpe y sin ser avisado, el equipo bávaro perdía la copa que había sostenido durante todo el encuentro. Aquel juego pasó a ser denominado El milagro del Camp Nou, en referencia al estadio que acogió el encuentro. Es también un clásico de los canales de televisión en las previas a las finales de todos los años.

5. FC Barcelona vs. PSG

Todos conocen la obsesión del París Saint-Germain por convertirse en un grande de Europa a como de lugar y al precio que sea, literalmente. No obstante, hasta ahora lo más que ha conseguido hacer Qatar con tanto dinero gastado es ser el protagonista de la remontada más vergonzosa hasta ahora en la Champions.

Los entonces dirigidos por Unai Emery ganaron el juego de ida por 4-0 en su campo y con eso dejaban puesta la daga en el corazón del Barcelona. Para el juego de vuelta marcaron incluso un gol, el cual obligaba a los catalanes a marcar seis. Solo un equipo épicamente novato se dejaría dar vuelta a tremenda situación. Y sí, los petrodólares del PSG se desmoronaron en cuestión de seis minutos, rematándose todo en un tiro libre cobrado por Neymar que alcanzó a puntear Sergi Roberto y consagrar una voltereta de 6-1, un marcador probablemente inédito en fases de eliminatorias directas de la Champions. El dinero de Qatar se sonrojaba y el PSG entraba –por fin- en la historia. @mundiario