El Real Madrid ganó y gustó

REAL MADRID
El equipo mostró un esquema agresivo, colectivo y dinámico. / @RealMadrid

El equipo de Zinedine Zidane venció con jerarquía al Borussia Mönchengladbach y avanzó como líder del grupo “B” a la siguiente fase de la Champions League.

El Real Madrid ganó y gustó

Real Madrid venció 2-0 al Borussia Mönchengladbach con dos goles de cabeza de Karim Benzema y avanzó como líder del grupo “B” a la siguiente fase de la Champions League. El cuadro merengue sacó su mejor versión y despejó todas sus dudas con un esquema agresivo acompañado con toque y dinámica.

La previa anunciaba una final. Había que ganar por orgullo, aunque el empate y otros resultados bastaba.  Entonces el Madrid sacó su casta, su jerarquía, su escudo y se convirtió en la locomotora histórica que ha sido en Europa. El Borussia Mönchengladbach, que llegó a la última jornada como líder de grupo, tenía dos opciones: Poner resistencia y sentirse puntero o hacerle sombra al equipo grande.

No eligió ninguna de las dos, pero justamente esa dualidad le pasó factura. Principalmente porque nunca estuvo interesado en tener la pelota y apenas al minuto 9’ recibió el primer golpe, el cual lastimó por completo su plan de aguantar el empate. Fue un golazo de cabeza de Karim Benzema tras un pase desde la derecha Lucas Vázquez.

El cuadro alemán respondió al 1-0 con un remate potente de Marcos Thuran (10’) pero de frente a la humanidad de Courtois y luego con un contragolpe mortal que no pudo definir Alessane Pléa (24´). El francés intentó una vaselina que se fue ancho ante el achique del portero merengue y el cruce de Sergio Ramos. Lo siguiente fue la repetición exacta de la receta del primer gol. Bien lo decía mi abuela; “No le cambien nada a la paella”, todos le hicimos caso, pero a nadie le quedó igual. El equipo de Zidane repitió y le funcionó: centro desde la derecha, esta vez de Rodygo, y cabezazo potente de Benzema que volvió a entrar como un fantasma sin oposición de los defensas. 2-0 y fiesta total en el estadio alterno Alfredo Di Stefano.

En el segundo el equipo blanco no bajó su intensidad. Dueño de la pelota y del partido se dedicó a tocar con comodidad con un esquema agresivo. Los centrales abiertos y los laterales pasando la mitad de la cancha, mientras que, Toni Kroos y Luka Modric se dedicaron a sacar la pelota a ras de piso. Faltó poner un tango de fondo para acampar los movimientos, pero más que música querían goles, y no llegaron gracias al travesaño. Al 72’ el portero Yann Sommer tapó un cabezazo de Sergio Ramos esta vez a pase de Toni Kross desde la izquierda y el reboté lo recogió Benzema quien quiso reventar el arco y estrelló el balón en el horizontal. Al 78’ el turno fue para Lucas Vázquez, de gran partido como falso lateral, quien estremeció el arquero izquierdo del portero visitante con un remate de derecha entrando desde la derecha al centro.

Las estadísticas no mienten. El Madrid fue claramente superior a su rival. Tuvo el 64% de posesión y acertó el 90% de los pases que ejecutó, generó siete ocasiones claras y celebró a lo grande una victoria que le devuelven la confianza y su posición en Europa. Avanzo como líder del grupo “B” e intentará mantener memoria futbolística en octavos para mantener este ritmo de buen fútbol.  @mundiario

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