Sobre la náutica actual en España

Barcos en Cantabria. / Pïxabay
Barcos en Cantabria. / Pïxabay

Actualmente debido a la situación económica en España, muchos de los trabajadores que no están en activo, se están inclinando por trabajos náuticos de todo tipo.

Sobre la náutica actual en España

Actualmente debido a la situación económica en España, muchos de los trabajadores que no están en activo, se están inclinando por trabajos náuticos de todo tipo.

La aclaración es fundamental. Hay muchos de estos puestos que son temporales, debido a la particularidad de los mismos, sobre todo su estacionalidad, ya que las temporadas estivales en su momento comenzaban aproximadamente por Semana Santa y terminaban hacia mediados de septiembre.

Hoy en día, depende fundamentalmente de la zona geográfica donde se vaya a trabajar, un Mediterráneo depende del turismo extranjero y nacional, siendo el resto de la Península turismo nacional, que hoy es el que se mueve realmente. Siendo cada vez más numerosos por todo el norte de España proliferan este tipo de actividades.

En éstos se encuentran los socorristas de todo tipo, monitores de motonáutica, canales o zonas de alquiler náuticos. Los puertos por el contrario mantienen sus actividades durante todo el año, siendo potenciadas de mayo a septiembre por personal extra que una vez más es temporal. Pudiendo tener opciones de permanencia en sus puestos de trabajo, según valía y necesidades.

Estos trabajos se están viendo potenciados por la necesidad de personal que requieren estas zonas, ya que la vigilancia de embarcaciones y la seguridad de los clientes es fundamental.  Esta vigilancia únicamente la puede realizar una persona que cada vez busca mayor formación real y práctica. Esto es porque las responsabilidades de estos puestos en su mayoría están ya reguladas por Reales Decretos, profesionalizándose cada vez más con el paso del tiempo.

Hay multitud de regulaciones que no voy a nombrar, pero que sí hay que conocer para puntualizar e incluso organizar los trabajos a realizar. Pero tanto los canales náuticos, los flyboards, y la navegación de recreo cualquiera que sea su eslora están reguladas por Reales Decretos, Reglamentos Internacionales junto con legislación autonómica y local. Independientemente de aclaraciones, salvedades y como en el último BOE del 19 de mayo de este año, puntualizaciones a ciertas normas, sobre todo relativas a la seguridad y cuantía de las multas en función de la infracción.

La navegación en su conjunto, no sólo es segura, sino una actividad al aire libre, en la que hay que mantener las normas Covid como es lógico, pero que una vez realizadas son sencillas de mantener, bien por el uso de mascarillas, geles, ocupación de embarcaciones, etc… ya que en su mayoría al ser lista séptima, (uso privado o particular), son en su mayoría convivientes los que hacen la actividad en concreto. Y una actividad en auge, debido a la situación mantenida por tanto tiempo de confinamiento y las ganas de salidas de todo el mundo.

La venta de motos acuáticas es uno de los factores que nos detallan la situación real de la náutica, ya que se están vendiendo unidades que no han sido fabricadas todavía, la producción del 2021 está ya vendida, en espera de su entrega a los compradores.

Algo parecido está ocurriendo con las embarcaciones de todo tipo, que está moviendo el mercado de compra venta de manera importante, ya que la pesca, buceo, o simplemente la navegación por el simple disfrute de la navegación a motor o a vela, está tomando cada vez mayor importancia en las costas. Algo que puede ser aprovechado por los negocios de costa, que tienen una buena oportunidad de reinventarse, haciendo más accesible a todo tipo de público estos temas náuticos, en los que hay múltiples variantes para realizar.

El alquiler de embarcaciones está de moda, ya que el baño, la pesca, la navegación y visita de costas está garantizada, en los kilómetros de costa que España tiene, así como en pantanos; uno de los puntos a tratar sobre todo en el interior de la Península, donde su iniciación y práctica aún no ha llegado a un punto de inflexión, y es una oportunidad de negocio más, en las zonas permitidas ya que el uso del motor no lo está en la mayoría, sobre todo cuando el agua es para consumo humano, pero sí el de la vela en todas sus modalidades, algo a potenciar por los clubes y ayuntamientos locales, no sólo para el uso y disfrute de sus ciudadanos, sino como atractivo de turismo interior más, como ocurre en las Hoces del Río Duratón, en Sepúlveda, provincia de Segovia, donde se combina la actividad en kayak con el atractivo de la naturaleza por el río, buitres, paseos por el monte, etc… @mundiario 

 

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