¡Horrible fin de año!

MARTIN
Martin Braithwaite, delantero del FC Barcelona. / fcbarcelona.com

El Barça tuvo una tarde para el olvido con penalti errado, gol anulado, error en defensa y poca efectividad en ataque. La suma de todo eso fue un 1-1 ante el SD Eibar que salió del Camp Nou con una gran sonrisa y un premio merecido por salir a presionar a un rival que ataca, pero no define.

El FC Barcelona fuera de los puestos de copas. Sin Messi, sin efectividad en ataque y cometiendo errores defensivos el equipo azulgrana no pasó del empate 1-1 en casa ante el modesto SD Eibar y cerró el 2020 fuera de los puestos de clasificación a copas internacionales. El partido fue el resumen de un año deportivo inestable que lo deja con más dudas que certezas.  

Perro que ladra no muerde. Nunca estuvo tan bien dicho. El Barça te quita la pelota (74% de posesión) y te intimida con 16 remates, cinco de ellos con dirección al arco, cinco tiros de esquina, 69 duelos ganados ante 39 de su rival y 87% de precisión en los pases. Literalmente se te tira encima con técnica y dinámica pero su pegada no es dañina y su defensa no sólida. A medida que pasan los minutos, además, el rival se cree capaz y gana confianza.

Este martes fue el turno del SD Eibar, décimo cuarto en la tabla con 16 puntos. El equipo vasco salió decidido a presionar arriba a su rival, a incomodar su salida y a asfixiar sus ideas. El plan se combinó con un penalti errado a los 6’ minutos del ariete Martin Braithwaite quien la cruzó mucho y el balón se fue ancho a ras de piso. Sus manos a la cabeza fue el gesto de la noche. El danés de 29 años ex del C.D. Leganés sigue con la pólvora mojada y en 11 partidos solo suma dos goles.

Al 25’ el internacional con Dinamarca anotó a pase de Junior Firpo, pero el VAR apreció para anular el gol por posición adelantada. Una tarde de terror para un nueve quien heredó la camiseta de Luís Suárez. El Barça era claramente superior pero el fútbol se resuelve con goles. Lamentablemente cada vez que logró superar la presión de su rival se encontró con una mala definición o con un atinado portero Marko Dmitrović. 0-0 y al descanso.

Dembélé entró en el segundo tiempo para darle dinámica al equipo por la banda derecha y pudo haber anotado a pase de Pedri, pero de nuevo Dmitrović dijo presente como portero de discoteca neoyorkina; alto, elegante y con cara de pocos amigos. Fue entonces cuando vino el error propio. El central Araujo se equivocó en la salida y propició la entrada de Kike García para batir a Ter Stegen para el 0-1 al minuto 57’.  Derrota y escándalo en Barcelona hasta ese momento hasta que el 68’ Dembélé esta vez a pase de Junior Firpo desde la izquierda anotara el 1-1 definitivo.

Para redondear la tarde Coutinho tuvo que abandonar el partido cojeando con una posible lesión de rodilla. Con el empate azulgrana y la victoria de Sevilla 2-0 ante Villarreal el equipo de Ronald Koeman cerró el 2020 fuera de los puestos de copa. Es sexto con 25 puntos, cuatro más que el Granada que está en la séptima posición. @Mundiario.

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